Jornada que volvió a rozar la locura para el mercado español. La primera resistencia sirve para el despliegue de un patrón que la marca claramente como tal.
Situación de corto plazo:
El principio de polaridad técnico nos dice que una zona de soporte superada se convierte en resistencia y viceversa; y eso es lo que pasaba ayer en el mercado español. La pérdida del soporte decreciente que habíamos venido señalando precedió al desplome de los precios y quedó, al perderse, convertida en resistencia. Frente a ella se vivió ayer una nueva jornada de pánico - del vendedor hemos pasado al comprador -, en la que al cierre los precios evidenciaron un cansancio lógico a muy corto plazo pero que bien podría derivar en nuevo punto de inflexión si la vela desplegada ayer da paso a fuertes ventas de nuevo. No debe pasarse por alto que un movimiento de esta clase, en cuanto a la situación del mismo en tendencia, sería considerado - en circunstancias normales - un simple pullback, un movimiento de retorno a la antigua zona clave desde el que la tendencia podría reactivarse.
Situación tendencial:
Bajista sin posibilidad de discusión en estrechos rangos. La posibilidad de un rebote crece a medida que se incrementan los descensos, pero también con ello se deteriora el aspecto de medio/largo plazo del mercado. La pérdida de la banda 0,618/0,66, niveles que de momento han ofrecido soporte, ha sido vulnerada por el conjunto de la renta variable occidental.