Jornada de compras históricas e histéricas para el mercado español de renta variable, que celebró con júbilo la convicción de que llegado el momento habrá rescate para todos.
Situación de corto plazo:
Ganancias nunca vistas para nuestro Ibex 35, que recuperó de un plumazo las severas pérdidas de la semana previa; dejando así el desplome de mayo en poco y nada a la espera de lo que queda de mes. Un mes que pasa ser un brindis al desconcierto tras una jornada como la del viernes en que la penetración de la base del canal bajista nos obligó a dejar de trabajar bajo la hipótesis de que era razonablemente probable considerar la formación de un nuevo suelo a ese nivel como finalmente parece haber sucedido tras movimientos que han estado fuera de toda normalidad haciendo realmente intratable la situación desde un punto de vista técnico.
Es ciertamente complicado saber dónde estamos. De hecho, gráfico del Ibex en mano, el mercado simplemente habría rebotado hacia su directriz bajista de corto plazo, sin romper un primer máximo decreciente que es lo que nos sirve para definir tendencia.
Sin embargo, la contundencia de las medidas tomadas -que cierran la crisis de deuda europea que ha venido protagonizado el contexto-, el solape de subondas bajistas, el hueco de apertura seguido de vela blanca, y el volumen negociado en la violenta vuelta en "v" que podría haber experimentado el índice ayer invitan a considerar probable que se haya visto un suelo en relación con el tramo de caída mantenido desde los 11.570 puntos; aunque sea un paso por debajo de don esperábamos y sin tomarse la molestia de completar una corrección del 61,8%.
Ha abierto el mercado las condiciones, extremas, que le podrían permitir mantener una dinámica de recuperación, por supuesto con sensibles altibajos, hacia el techo del canal bajista tal y como se le muestra en el gráfico adjunto. Intentar enfocar este mercado desde una perspectiva del control del riesgo es tarea casi imposible.
Situación tendencial:
En revisión.