Detrás del mercado portugués, el principal índice de la renta variable española se hundió ayer sin contemplaciones reventando sus zonas de soporte clave.
Situación de corto plazo:
Con una caída que tiene claro perfil impulsivo desde los 11.600 puntos, zona de máximos de las últimas semanas, el Ibex 35 completaba un desplome que ayer anunció Portugal. Les cortaron las barbas a nuestros vecinos, que ayer continuaron siendo rasurados a conciencia, y lo más probable era que nos sucediese lo mismo a nosotros. La pérdida de los 10.750 puntos deja al índice en clara situación correctiva y advierte de que estamos en una segunda fase de ajuste que en principio debería llevarnos más allá de los mínimos de enero considerando que sigue siendo altamente probable que tengamos compañía bajista no sólo desde Europa sino, en un futuro no muy lejano, desde una sobrecompradísima Bolsa de Nueva York.
Situación tendencial:
En fase correctiva del alza de 2009, la pérdida de los 10.750 puntos abre una segunda fase de ajuste correctivo que debería llevar al índice Ibex 35 claramente por debajo de los 10.000 puntos -y seguramente más cerca de los 9.000 que de éstos- en los próximos meses. No nos atrevemos a dar por buenas las señales en un perfil tendencial mientras no las comportan las principales referencia de la renta variable europea; circunstancia para que la que el Eurostoxx 50 debería perder claramente los mínimos de enero.