No hubo recaída de los futuros europeos y el Ibex 35 rompió con volumen la zona de resistencia clave de los 14.400.
Situación de corto plazo:
Un paso adelante en el escenario de vuelta a máximos que hemos defendido posible desde la zona de los 13.600 en contraposición con la posibilidad de una gran figura de vuelta a bajista en cabeza y hombros que nunca ha sido confirmada.
Los bajistas están ahora claramente de un gran triunfo aunque éste no sea imposible (no olvidamos las vueltas mensuales, ni los volúmenes de caída, ni otras cuestiones que sugieren que aún podría haber nuevos mínimos). Con todo, la verticalidad del alza es mucha y ayer se dejó otro hombre colgado tras alcanzarse la resistencia natural que se corresponde a una recuperación del 66,6% del proceso de corrección bajista que arrancaba a finales de febrero. El alza puede ser buena pero hace falta sosiego, consolidación..., y son las zonas alcanzadas en vertical en el rebote perfectas para que haya, al menos, un alto en el camino.
En plena caída consideramos que se vería un rebote de cierta intensidad, por dos veces, con la vista puesta en ambas en el segundo hueco (14.400). Hoy, pese a una ruptura que podría verse como isla alcista, no perdemos de vista que el rebote ha tenido también tres grandes huecos como los tuvo la caída. Si tres gaps a la baja nos señalaron alta probabilidad de rebote, tres huecos al alza señalan justo lo contrario. Puede que volvamos a máximos, pero no es razonable que suceda sin pausas y esta es una perfecta situación para que se produzcan.
Situación tendencial:
Empieza a difuminarse el cambio de tendencia y va creciendo la sensación de que las velas bajistas mensuales desplegadas en febrero, pese a toda su violencia y volumen negociado, pueden ser finalmente un simple alto en el camino en un movimiento lateral de cierta intensidad. Una corrección más en tiempo que en profundidad. Como hemos venido comentando, sólo la pérdida de la zona de los 13.550 puntos (por confirmación de figura de vuelta en cabeza y hombros) sería nítidamente bajista en tendencia. Mientras eso no suceda, en la tendencia de fondo, el toro sigue mandando. Eso sí, si llegase a suceder, huya.