Ecoaula
¿Cómo controlar los nervios y la ansiedad de la EvAU?
- Estudiar los minutos antes del examen no resulta de ayuda para gestionar el estrés
Carmen García
Madrid,
Comienza la recta final para todos aquellos estudiantes que quieren iniciar una nueva etapa en la universidad. Cerca de 300.000 alumnos procedentes de todas las regiones de España comienzan esta semana la Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU), que llevan preparando, en algunos casos, más de un año. Son entre tres o cuatro días de mucha exigencia, presión y nervios que deben controlar para centrarse en obtener la mejor nota posible.
Alejandra Koeneke, Doctora en neurociencia y profesora de Psicología en la Universidad Europea, explica la importancia que tiene que un estudiante se organice en torno a un horario en el que se cubran todas sus necesidades como persona y como alumno para evitar concentrar todos los esfuerzos a final de curso. Los nervios pasan a ser los protagonistas, dejando de lado el auto-control y la tranquilidad. Una de las técnicas recomendadas por Koeneke para controlar esta situación es el mindfulness desde principio de curso: "Aunque parezca una utopía, ya hay muchos centros educativos de España que están empezando a implementar este tipo de técnicas y en países como Inglaterra y Australia lo van a implantar en el currículo del ministerio", indica. Se trata de un ejercicio que ayuda a adaptar el cerebro a recabar información, auto-gestionar las emociones y mantener la fuerza de voluntad a lo largo del curso.
Al margen de técnicas que contribuyan al bienestar de los estudiantes, es importante, según la docente, que dediquen tiempo a complementar su actividad académica con otro tipo de actividades de ocio y tiempo libre, ya que es tan importante como saber desarrollar estrategias de estudio. "Los estudiantes que están en algún equipo deportivo son los que mejores calificaciones obtienen porque suelen organizarse para estudiar día a día y aprovechan mejor el tiempo", explica Koeneke. El sueño y la alimentación son dos factores que pueden influir de forma negativa si no se cuidan de la forma adecuada. En palabras de la doctora: "Es importante dormir al menos 7 horas al día porque es una forma de consolidar y organizar los conocimientos", manifiesta. Con respecto a la alimentación se recomienda preferiblemente consumir legumbres, arroz, hidratos de carbono lentos o frutos secos.
Autocuestionarse la necesidad del móvil durante el estudio
Hoy en día las tecnologías están más presentes que nunca en nuestra forma de vivir y, también, de estudiar. Es por ello que la presencia de los teléfonos móviles durante el estudio pueden perjudicar el nivel de concentración. No obstante, Alejandra considera que esta decisión debe ser tomada por los propios estudiantes: "Lo ideal es que poco a poco, intenten ir guardándolo para conseguir estudiar sin mirar el móvil durante, por ejemplo, 35 minutos".
El lugar de trabajo debe ser un sitio tranquilo y cómodo en el que el propio joven se sienta a gusto. Para ello es imprescindible contar con el apoyo de la familia, que juega un rol protagonista durante esta etapa. Para Koeneke: "La función de los padres es ayudarles a ser adultos y autónomos, no crear un hijo lo más perfecto posible. Hay que tratar al estudiante desde el respeto y estar a su disposición por cualquier ayuda que puedan necesitar", declara.
Estudiar justo después de un examen, ¿efectivo?
Durante los días que dura la EvAU los alumnos se enfrentan a continuos y seguidos retos de hora y media con descansos breves. En muchos de estos momentos los estudiantes, nerviosos por la siguiente prueba, se lanzan a repasar los conocimientos de los que se van a evaluar durante la siguiente hora y media, sin embargo ¿esto resulta realmente efectivo? La profesora de la Universidad Europea lo tiene claro: "Hay que tener en cuenta que es importante descansar bien y alimentarnos bien, pues es una forma de "echar gasolina" a nuestro cerebro". Resalta que estudiar hasta los minutos antes del examen no resulta de ayuda para gestionar la ansiedad. Además, añade que no hay que tener ningún tipo de remordimiento por descansar, irse al gimnasio o a la piscina, ya que es algo que nos puede ayudar a rendir mucho más cuando continuemos con el estudio.