Status
Bodegas Valhalla recupera el hidromiel, la legendaria bebida de los vikingos
Ignacio Pons
Tras vencer en batalla a las legiones romanas, los vikingos regresaban al hogar y brindaban con hidromiel como recompensa. El elixir de los dioses era tan apreciado que se dice que era el preferido del mismísimo Julio César. Y aunque su origen es español -concretamente, en la zona de Levante hace 9.000 años-, generación tras generación este espirituoso se extendió por distintos países. Pero los tiempos fueron cambiando y desapareció de nuestras tierras, limitándose a los países escandinavos y relegado a las novelas de fantasía.
A pesar de ello, esta cultura renació. Poco a poco, seguidores de El señor de los anillos, la serie Vikingos y la saga de George R. R. Martin, Canción de hielo y fuego, descubrieron el licor y buscaron la forma de probarlo en ferias. Al final, muchos lograron hacer el suyo propio artesanalmente hasta que, en 2015, apareció uno oficial: Bodegas Valhalla, fundada por Luis Martínez y José Ramón González-Sicilia. Durante este tiempo han pasado de vender un número humilde de botellas a comercializar 30.000 litros de la bebida con los que esperan obtener 150.000 euros este año. Cifra que se ha disparado, en gran parte, gracias al éxito de la serie Juego de Tronos, donde varios personajes se deleitan con esta bebida.
Pero, ¿por qué no se patentaba el hidromiel? Según Martínez, "el mayor problema era que en España nadie lo conocía y en el mercado del alcohol hay mucha competencia. Además, para crear una nueva, hay muchos trámites que asustan".
Sin embargo, donde unos ven un obstáculo, siempre hay un emprendedor que ve una oportunidad. Y "haber estudiado Administración y Finanzas fue clave para tener éxito", apunta Martínez, quien añade que Bodegas Valhalla "surge por la precariedad laboral y el boom de la cerveza artesana". Ellos vieron que era posible, siempre y cuando fueran distintos. Así que, investigaron recetas e hicieron pruebas hasta obtener un resultado convincente.
Para los fundadores, la falta de conocimiento era a la vez un handicap y una ventaja por la ausencia de competencia: "la gastronomía es muy amplia y siempre hay gente dispuesta a probar nuevos sabores y sensaciones", señala Martínez.
Así, este hidromiel que venden en su web, junto a objetos vikingos como cuernos y jarras donde beberlo, ya ha llegado a varios bares de España y los creadores esperan expandir pronto sus botellas por Europa. Para ello, les será de gran ayuda la reciente subvención conseguida de Icex de 22.000 euros.
A diferencia de España, donde el hidromiel tiene escasa tradición, en países como Francia o Portugal esta bebida lleva años de moda, por lo que los fundadores confían en tener "una mejor acogida". Entonces, ¿llegará el cuerno de hidromiel a desbancar a la jarra de cerveza?