El lujoso superyate Moonraker

Reconocida internacionalmente como uno de los principales corredores de yates de lujo en todo el mundo, la firma Burgess Yachts cuenta con una de las flotas de renta más privilegiadas del mercado. Tras 40 años de éxito y crecimiento continuo, la empresa fundada por el renombrado empresario y regatista británico Nigel Burgess ha ampliado su flota con la incorporación de un impresionante superyate de 165 pies de eslora (50 metros) y 30,2 pies de manga (9,2 metros) bautizado como Moonraker. Información facilitada por la web de estilo de vida de lujo azureazure.com.

La premisa fundamental que ha posicionado a esta compañía londinense como una de las líderes del mercado es la convicción de que la calidad de servicios y productos resulta el principal valor de oferta en este nicho tan exigente y especializado. Gracias a ello, en el 2001 Burgess Yachts fue la primera empresa del rubro en recibir el premio Queen´s Awards for Enterprise, concedido a firmas y organizaciones británicas que se destacan por su excelencia en innovación, comercio internacional y desarrollo sostenible.

En este contexto de excelencia, Burgess Yachts ha incorporado a su flota de renta el espectacular Moonraker 165, un lujoso megayate que se distingue por su confort y rendimiento, sin dejar de lado la deportividad. Construido por el astillero italiano Overmarine y diseñado por Stefano Righini, el Moonraker 165 sobresale por su perfil de lujo moderno y avanzada tecnología. Su salón principal, por ejemplo, ostenta generosos ventanales en ambos flancos, área de comedor con una elegante mesa para ocho comensales, sala con sillones y mesas bajas y un bar con banquetas giratorias, así como una espléndida cava con capacidad para 100 botellas y un magnífico humidificador de vidrio para habanos. Otro aspecto interesante del salón principal es su sistema de sonido y luces de última generación, que permite crear todo tipo de ambientes, perfectos para celebraciones nocturnas.

Con capacidad para 10 invitados, esta mansión flotante ofrece un camarote principal de proa con estudio, vestidor y baño con sistema de vapor y aromaterapia. También alberga un camarote VIP y otras dos habitaciones dobles, todas con sus propios baños en suite. Para el entretenimiento, además de su gimnasio totalmente equipado, el Moonraker cuenta con una sorprendente sala de cine con pantalla gigante y butacas especialmente diseñadas con compartimientos para refrigerios.

Los espacios al aire libre son generosísimos, pues el Moonraker se distingue por su amplia cubierta de popa, con comedor, área de estar y acceso a la planchada posterior (o beach club), mientras que en la proa cuenta con un espectacular solárium, acompañado por un enorme jacuzzi (con techo retráctil como opción) con excelentes vistas panorámicas. Para completar la experiencia cinco estrellas, el megayate incluye servicio de cocina gourmet y embarcaciones complementarias de entretenimiento, como motos acuáticas y una lancha de carreras con motor de 250 caballos, entre otros equipamientos.

Pero el Moonraker no es sólo lujo y confort. También ofrece excelentes velocidades de hasta 40 nudos, gracias a sus tres motores MTU de 4.609 caballos de potencia, con un alcance de 691 millas náuticas (1.280 kilómetros).

Para su inauguración en esta temporada 2014-2015, Burgess Yachts no pudo pensar en mejores paisajes que las paradisiacas islas de las Bahamas, un sitio que brinda grandes comodidades al mercado estadounidense por su cercanía. Con un precio de renta semanal que comienza en los 217.000 dólares, la aventura en el espectacular Moonraker 165 se convierte en la escapada vacacional perfecta.