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Blondie Bennett, una barbie de los pies a la cabeza
Blondie Bennett quiere ser una muñeca barbie, pero de las de verdad, de las de plástico y sin cerebro. Por ello, se está sometiendo a numerosas operaciones y a sesiones de hipnosis para reducir su coeficiente intelectual.
Esta californiana de 38 años ha asegurado en un programa de televisión que la vida normal no le interesa demasiado: "no me gusta el ser humano y lo natural me parece aburrido; me gustaría ser totalmente de plástico".
Bennett se muestra contenta con los cambios en su cuerpo, y lo muestra al mundo en fotografías que cuelga en público a través de su cuenta de Twitter.
De momento no se sabe la efectividad de las sesiones a las que se está sometiendo, ni hasta donde quiere llegar en su proceso de trasformación. En en terreno físico, lo está consiguiendo y en el intelectual, parece que va por el camino.