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Lo mejor del típico asador del Madrid antiguo en el nuevo Arizmendi
Por este comedor pasó el todo Madrid en su día, cuando aquel primer Frontón -luego le seguirían otros-, supuso una gran novedad en la ciudad. Un restaurante de esos de siempre, enclavado en un primer piso (muy típico de la capital en aquella época) en el que la exquisita carne y sus pescados eran sus poderosos reclamos.
Hoy se ha renovado, pero sólo en cuanto a la propiedad, porque todo lo demás se puede decir que sigue igual. Esas escaleras angostas que suben a un comedor decorado de manera sencilla en un estilo tradicional y con algunos ventanales que dan a la plaza de Tirso de Molina, en pleno centro de la urbe.
Hoy es la familia propietaria del local la que ha inaugurado su propio negocio, ahora con su apellido, Arizmendi. Pero ha tenido la sabiduría de optar por una línea continuista y mantener la de sus antecesores junto a un mismo equipo en cocina y sala. Cocina de ascendencia vasco-navarra principalmente, apoyada en la excelencia de sus materias primas. Aquí no hay distracciones posibles, a excepción de lo que se encuentra en el plato, que es de primera línea.
El joven empresario Alejandro Arizmendi que está el frente se ha hecho con unos excepcionales proveedores. La parrilla, alimentada con carbón de encina, da el punto perfecto a la deliciosa carne del chuletón (para dos personas), que llega de Galicia. Es un gusto ver la fuente del cogote de merluza (también para dos personas) o ese rape de categoría que hacen también a la parrilla. Casi obligatorio pedir los pimientos de piquillo llegados de Tolosa, que hacen confitados y al horno como acompañamiento.
Como entradas, los mismos pimientos rellenos de bacalao o las pochas con merluza. Siempre, a la carta habitual se suman unas sugerencias de temporada. En este momento tienen unos deliciosos espárragos blancos que ellos preparan cocidos y sirven tibios, las alcachofas rellenas de changurro o los chipirones encebollados en dos texturas. La ensalada de tomate pelado con ventresca es también una buena opción.
Entre los postres, el tradicional goxúa -con nata, bizcocho y crema pastelera servido en vaso-, la panchineta o una espectacular cuajada casera que sirven con azúcar o miel.
En general un ambiente distendido y sencillo, con atento y amable servicio femenino como es tradicional en los restaurantes del norte. Carta de vinos con especial atención a Rioja y Ribera del Duero. En general, se disfruta de un ambiente distendido y sencillo.
Asador Arizmendi
Plaza de Tirso de Molina, 7. Madrid.
Tel.: 914295030/ 3763.
Cierra domingos noche.
Un privado para 12 personas.
Parking concertado (2 horas gratis).
Menú
Primero: Espárragos blancos naturales.
Segundo: Chuletón de buey Postre: Cuajada.
Precio medio: 45 euros; Menú degustación, 40 euros.
La cata
Avenencia 2010
Bodegas Avenencia/ D.O. Rueda.
PVP recomendado 6 euros.
Calificación 8,7/10.
A. M. Un estupendo Rueda con personalidad y matices que se aleja de las grandes producciones -usualmente insulsas- de esta famosa comarca. Fue elaborado con verdejo de viñedos propios de más de 50 años y vinificado en la bodega familiar de Félix Lorenzo Cachazo. Una producción de 9.900 botellas y una excelente relación calidad precio, en este vino intenso, aromático y elegante, que hará buena compañía al pulpo mariscos y arroces de pescado.