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De 'Marky Mark' a Mark Wahlberg, de 'macarra' a 'luchador'
A lo largo de toda su carrera profesional, Mark Wahlberg ha pasado por numerosas etapas, desde las más macarras como rapero con 'Marky Mark' hasta las más exitosas, con su nominación al Globo de Oro incluída y paseo por la alfombra roja bajo el brazo de 'The Fighter'.
En sus inicios, Wahlberg se dio a conocer en el mundo de la música con 'Good Vibration', un disco de rap publicado por su grupo 'Marky Mark & the Funky Bunch'. Pero la fama, no le llegó hasta que se pasó al mundo de la interpretación y el modelaje.
En 1991, el mismo año en el que publicó su primer éxito como rapero, fue escogido por la conocida marca Calvin Klein para promocionar su colección de ropa interior.
En esa época, aunque se convierte un icono de la moda y es sólo entonces cuando salta a la palestra su problemático pasado.
Wahlberg era adicto a la cocaína con sólo 13 años. Además, sus antecedentes de violencia racista, con diversos episodios de extrema seriedad -incluso llego a dejar ciego permanentemente de un ojo a un vietnamita- durante su adolescencia aún coleaban cuando empezó a convertirse en la sensación de todas las firmas de moda. Sus campañas con Calvin Klein y las portadas de las revistas se compaginaban con acusaciones de homofobia y racismo por parte de un sector de los medios.
El cine, su redención
Tras su éxito como modelo saltó a la gran pantalla junto Patrick McGaw, James Madio y Leonardo Di Caprio en Diario de un rebelde (1995).
Tras este éxito, comenzó a codearse con los mejores actores y directores de Hollywood co-protagonizando grandes éxitos de pantalla como Tres Reyes, junto a Ice Cube y George Clooney; La tormenta perfecta , El Tirador o Max Payne.
Las nominaciones a premios no se hicieron esperar, así en 2006 obtuvo su primera nominación a los Óscar, por su papel en Infiltrados, dirigida por Martin Scorsese. Tras ésta le siguieron otras tantas hasta nominación a los Globos de Oro por su papel protagonista en The Fighter, que opta como 'Mejor Película' a los premios de la Academia este año y que, sin embargo, le ha olvidado a la hora de repartir las nominaciones.
De aquel chico de barrio, violento y adicto a las drogas ya no queda nada. Eso es lo que entierra su papel en 'The Fighter', donde interpreta al 'hermano bueno' -el de oveja negra lo interpreta magistralmente Christian Bale- que lucha honradamente por el triunfo.
¿Se cierra un ciclo?
Wahlberg, católico -de misa semanal- e implicado en diversas campañas de ayuda a los jóvenes ha dado un giro radical a su vida. O al menos, eso parece. Del joven lleno de testorona de los anuncios de ropa interior al noble Micky Ward -que interpreta en su última película- va todo un mundo, en el que ya no hay portadas de la prensa sensacionalista y los papeles con los grandes directores son una constante -Scorsese, Paul Thomas Anderson, Petersen...-
Como si hubiera tomado 'prestado' en la vida real el papel que Christian Bale interpreta en 'The Fighter, Wahlberg, finalmente, ha completado su ciclo y se ha redimido. Al menos, hasta que no se demuestre lo contrario...