La promesa de Donald Trump a Elon Musk después de que las acciones de Tesla se desplomen
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Daniel Gordo
Con la llegada de Donald Trump a La Casa Blanca y el nombramiento de Elon Musk como zar de facto de la reducción de costes de la administración del presidente de los Estados Unidos, el precio de las acciones de Tesla subieron bruscamente.
Sin embargo, el pasado lunes, las acciones de la compañía cayeron más de un 15 por ciento en el día, y más del 50 por ciento desde un máximo de mediados de diciembre, puesto que los inversores registraron el impacto de la caída de las ventas y las airadas protestas por el papel político de alto perfil que Musk, también director ejecutivo de Tesla, ha asumido.
Defendiendo a su influyente donante de campaña y aliado político, Trump comentó en una publicación en Truth Social (red social lanzada por Trump Media & Technology Group) el lunes por la noche que Musk estaba haciendo un "trabajo fantástico", pero argumentó que "lunáticos radicales de izquierda" estaban tratando de boicotear al empresario y fabricante de vehículos.
La promesa de Trump a Musk
A pesar de sus numerosas críticas a los coches eléctricos, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, elogió a Elon Musk y dijo que compraría "un Tesla nuevo" después de que las acciones del fabricante estadounidense se desplomasen a su punto más bajo desde antes del día de las elecciones.
"En cualquier caso, voy a comprar un Tesla nuevo mañana por la mañana como muestra de confianza y apoyo a Elon Musk, un estadounidense verdaderamente grande", dijo Trump. Musk agradeció al presidente en una publicación en las redes sociales, y el precio de las acciones de Tesla subió ligeramente en las operaciones previas a la comercialización el martes.
Esta defensa de Donald Trump a Tesla se produce tras una orden ejecutiva firmada en enero que, entre otras cosas, eliminó los beneficios fiscales para los vehículo eléctricos, lo que dificulta considerablemente la vida de los fabricantes de automóviles que gayan invertido millones de euros en la producción de este tipo de vehículos.
Además, tal y como aseguran desde The New York Times, el presidente de los Estados Unidos ha dicho anteriormente que apoyar a la industria del coche eléctrico era una "locura", en palabras textuales de Trump. No obstante, admitió el año pasado que respaldaría al sector por el apoyo recibido por parte de Musk.
Por su parte, los inversores esperaban que el apoyo financiero de Musk a la campaña electoral de Trump y su papel en la órbita del presidente beneficiasen considerablemente a Tesla, y enviaron el precio de sus acciones a máximos históricos.
No obstante, la participación del director ejecutivo de Tesla en la administración ha provocado una reacción violenta, en parte por sus profundos recortes a las agencias federales, liderados por la iniciativa de reducción de costos que ha llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental.
Esa ira ha hecho que Tesla se convierta en blanco de manifestaciones y boicots, con estaciones de carga de Tesla incendiadas cerca de Boston y disparos contra un concesionario de Tesla en Oregón la semana pasada.