Actualidad

Hazlo tú mismo: el infalible truco de un fontanero para desatascar el fregadero o el lavabo en segundos

Persona usando un desatascador en el fregadero de la cocina. Firma: iStock

elEconomista.es

El lavabo y el fregadero son elementos del hogar que utilizamos con frecuencia a diario, por eso es común que se puedan atascar. Lo mejor en estos casos sería llamar a un fontanero pero existen algunos consejos para poder desatascarlos en poco tiempo y evitar que la situación vaya a peor.

Algunos síntomas de que el fregadero o el lavabo no están funcionando bien es cuando empieza a tragar más despacio y el agua tarda más en desaparecer. Es mejor actuar en esos momentos y no dejar esperar a que se atasque del todo.

Es más común que los fregaderos se atasquen al acumularse residuos como restos de comida al enjuagar los platos o los cubiertos. Mientras que, en el lavabo, los desagües pueden tragar peor por la acumulación de pelos o residuos de productos de limpieza.

Cómo desatascar el fregadero o el lavabo

Según un fontanero profesional, cuando el problema ya ha aparecido, una de las soluciones es usar un desatascador y taponar el rebosadero, que es la abertura por donde puede salir el agua para evitar que el lavabo o fregadero se desborde. Para obstruirlo, se debe colocar una tira de cinta adhesiva para sellarlo.

El siguiente paso es llenar el fregadero o lavabo con un poco de agua caliente para luego poner el desatascador sobre el desagüe y bombear durante unos minutos. Esto provocará que los residuos acumulados empiezan a moverse, ayudando a ser eliminados y desatascando el desagüe.

Existen otras herramientas para quitar un atasco, como un cable de desatasco o muelle de fontanero. Otra opción es usar productos químicos específicos vendidos en supermercados o utilizar métodos caseros como vinagre y bicarbonato de sodio.