Actualidad
He obtenido un dinero que no me esperaba: esto debes hacer, según una experta financiera
- Elliot aconseja priorizar siempre las metas financieras
- El ahorro implica hacer sacrificios, pero no sacrificar el bienestar
- Dependiendo del dinero obtenido, las decisiones aconsejables cambian
elEconomista.es
Madrid,
Cuando una persona obtiene dinero sin esperárselo, este es sin duda un momento agradable. No cabe duda de que las sensaciones serán distintas según el importe y la situación financiera de la persona, y en ciertos casos pueden tener la capacidad de trastocar por completo el estilo de vida de la persona en cuestión. Por ejemplo, alguien que ganase la lotería.
Si la cantidad es importante, quizás la persona pueda servirse de ella para aliviar una deuda o una necesidad fundamental. Pero también puede que la persona no tenga problemas financieros. En ese caso podría tentarle a gastar el dinero de manera poco planificada y quizás irresponsable.
La periodista experta en economía, Kamaron McNair, afirma que la mentalidad de la persona frente a este tipo de situaciones puede evitar que desperdicie su oportunidad para corregir o poner en marcha algún proyecto financiero. McNair se apoya en la planificadora financiera Kamila Elliot para ofrecer tres pasos, con los que asegura que la persona podrá actuar responsablemente.
1. Pequeños objetivos para progresar
Las metas financieras son importante en la vida, tanto aquellas a largo plazo, como otras más efímeras . McNair asegura que apuntarlas ayuda a recordar dichos propósitos, disminuyendo así el riesgo de salirse del camino. "Si consigues un ingreso imprevisto de entre 500 y 5.000 euros, y nunca hiciste planes sobre tus objetivos, entonces es muy fácil usar el dinero para algo muy a corto plazo", explica Kamila Elliot.
Aunque puede ser que ese dinero no sea suficiente para alcanzar las mayores metas financieras, la experta pide recordar que toda cantidad es suficiente para avanzar en cualquier proceso. Ella suele preguntar a sus clientes: "¿Te ves trabajando duro durante los próximos 20-30 años?" Muchos le responden que: "No, quiero jubilarme pronto", o "Hago esto para ganar dinero, hasta que llegue el momento en el que pueda hacer lo que más me gusta".
Elliot trabaja para ayudarles a que desarrollen metas que reflejen sus auténticas pasiones, las cuales suelen incluir trabajar menos, o bien crear un negocio. La planificadora asegura que cada euro bien invertido ayuda a hacer realidad los sueños personales.
2. Ahorrar de forma consistente
Está claro que de escenarios como encontrarse un billete de 50, o tener algo de suerte en un 'rasca y gana', no pueden surgir nuevos hábitos. Sin embargo, esto no quiere decir que no se posea un plan para relocalizar parte del dinero extra que se ha ganado. "Crear riqueza no siempre se trata de sumar dinero. También va de la consistencia en aquellos comportamientos de ahorro", comenta Elliot.
Como ejemplo habla de la planificación para transferir parte, o el total de los reembolsos por devoluciones de impuestos, a la cuenta bancaria. Otro sería separar los billetes de 5 euros, en vez de gastar todo el dinero antes de obtener más, para una época en la que se acabe la bonanza económica. Para Elliot, por muy pequeñas que sean las cantidades, si se mantienen en el tiempo el ahorro crecerá sin parar. "Puede parecer poco ahora, pero si ahorras esa cantidad durante 5, 10 o 20 años, entonces se convertirá en una suma cuantiosa", añade.
3. ¿Cuánto gastar y cuándo ahorrar?
Elliot dice que no hay nada de malo en utilizar ese ingreso imprevisto para algo placentero como un viaje o comprar un coche. Ahora, asumiendo que la prioridad deben ser los objetivos financieros, comenta que siempre aconseja a sus clientes que inviertan en aquello que realmente les traiga felicidad.
Cuando una persona ahorra siempre tiene que hacer sacrificios. Por ejemplo, Elliot recuerda que 1.000 euros extra pueden resultar en un increíble viaje, pero también podrían ayudar a estar un paso más cerca de un objetivo financiero, como jubilarse antes. Pregunta entonces a sus clientes si les merece la pena irse de viaje, implicando a cambio un mayor tiempo ahorrando para conseguir algo deseado.
"Cuando lo planteas así la gente piensa '¿Realmente esto me hace feliz o lo estoy haciendo por hacer?' La gente no quiere ahorrar cada euro y sentir que está trabajando mucho, para luego no poder disfrutarlo de ninguna forma", asegura Elliot. Y es que todo se reduce a una decisión personal. El dinero, la vida y los valores cambian en cada persona, pero recordar esto puede ayudar a centrarse en las metas vitales, así como en la manera de alcanzarlas.