Ingeniería industrial necesaria para la transición energética

Residuos forestales convertidos en bioetanol, producción de hidrógeno para movilidad sostenible, utilización de residuos agrícolas para generar productos químicos destinados a la industria farmacéutica, reciclado de palas eólicas para obtener fibra de vidrio, producción de biodiésel a partir de aceites de cocina, proyectos de descarbonización de plantas industriales, recuperación de materiales críticos y tierras raras, sistemas de captura y almacenamiento de CO2… La lista de iniciativas directamente relacionadas con la transición energética que viene desarrollando Técnicas Reunidas a lo largo de los últimos años es creciente, amplia y variada.

Sin duda, la empresa española es más conocida por sus trabajos de ingeniería y desarrollo de plantas de refino, petroquímicas o de aprovechamiento de gas que por estas actuaciones más estrechamente vinculadas a la descarbonización. No obstante, también los primeros se encuentran orientados a contribuir a este esfuerzo.

En efecto, esas inversiones se orientan a mejorar las especificaciones de los combustibles generados, consiguiendo así un efecto positivo sobre la calidad del aire; a la producción de componentes petroquímicos imprescindibles para la sanidad, el acceso al agua potable, la mejora de la eficiencia energética, etc.; y, en el caso del gas natural, a la producción de energía para la descarbonización de la economía y el impulso de sistemas de cocción limpia.

La lista de iniciativas relacionadas con la transición energética es creciente, amplia y variada

De esta forma, la larga experiencia de Técnicas Reunidas como empresa especializada en ingeniería avanzada y su sólido conocimiento de procesos industriales de muy diversa naturaleza, le permiten acompañar a los demás agentes que están implicados en la transición energética y colaborar con ellos en los objetivos de descarbonización.

Economía circular

Entre las actuaciones recientes de la empresa en economía circular, destacan el proyecto de diseño y construcción en Ámsterdam de una planta que producirá biometanol a partir de la gasificación de biomasa y residuos no reciclables para contribuir a la descarbonización del transporte; y dos contratos conseguidos en Suiza: uno para el desarrollo de la ingeniería preliminar de una planta de recuperación de zinc, cemento de cobre-cadmio y plomo a partir del tratamiento de cenizas de residuos sólidos incinerados, y otro para la realización de una instalación destinada a la recuperación de fósforo mediante el tratamiento de cenizas de lodos procedentes de depuradoras.

Otro ejemplo de sus actividades en este ámbito es el premio recibido este año por un proyecto desarrollado en colaboración con Reciclalia, cuyo objetivo es el desarrollo de tecnologías para la obtención de fibra de vidrio procedente de las palas de los parques eólicos que llegan al final de su vida útil, a fin de hacer posible su uso posterior en transporte (automoción, aeronáutico y ferroviario), construcción sostenible y nuevos parques eólicos. De esta manera, se contribuye al llamamiento realizado por la asociación eólica europea, WIndEurope, para que no se entierren más palas eólicas en vertederos a partir del 2025 y, además, se consigue una sustancial reducción de emisiones, ya que se calcula que el uso de fibra vidrio hace que un aerogenerador emita a lo largo de su vida útil el equivalente a 166 toneladas de CO2.

Estas iniciativas son un buen ejemplo de dos aspectos muy relevantes de la economía circular que subrayan de manera insistente los expertos de Técnicas Reunidas. El primero es que, por más que sea muy positivo el reciclado de productos y residuos en la fase de consumo final, la aportación más importante de la economía circular se deriva de su aplicación en toda la cadena de valor de los procesos industriales. Y el segundo es que el desarrollo de la economía circular requiere el establecimiento de nuevos modelos de relaciones industriales en los que empresas de diferentes sectores colaboren y adapten sus procesos al aprovechamiento recíproco de sus respectivos productos y residuos.

La lista de iniciativas de Técnicas Reunidas relacionadas con la transición energética es creciente, amplia y variada

En esta última vertiente, la compañía asegura que sus décadas de experiencia en ingeniería y "know how" tecnológico le permiten hacer una contribución importante en este campo, tanto en actuaciones de iniciativa empresarial como de colaboración público-privada, especialmente con el objetivo de escalar estos proyectos, a fin de que alcancen su madurez tecnológica y económica, y aplicando el criterio de promover un efecto de arrastre sobre el tejido empresarial español, sobre todo en relación con las pymes.

Para ello, cuenta con la base de conocimiento que le proporcionan los cerca de 5.000 ingenieros de alta cualificación y en permanente formación continua que integran su plantilla de 8.000 empleados y con el esfuerzo de investigación que lleva a cabo a través de su centro tecnológico ubicado en Madrid.

Desarrollo del hidrógeno

Otro ámbito de actuación fuertemente ligado a la transición energética en el que está presente Técnicas Reunidas es el de la producción y suministro de hidrógeno. La empresa cuenta con una amplia experiencia en este campo. Ha intervenido en el impulso y desarrollo de más de 30 instalaciones que aplican diferentes tecnologías y actualmente está participando en varios proyectos que son punteros en la generación de hidrógeno verde.

Varios de ellos presentan un suficiente nivel de maduración y pueden considerarse como comerciales; otros son plantas de demostración para escalar la tecnología a fin de conseguir el nivel de comercialización; y otros son proyectos de investigación, principalmente en el marco de los programas Horizon, de la Unión Europea, y Misiones, del Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI).

Uno de los más relevantes consiste en la ingeniería de detalle de una planta de producción de hidrógeno verde a través de sistemas de electrolisis de 2,5 MW de capacidad que un consorcio de empresas españolas está desarrollando en Mallorca. Esta instalación producirá 300 toneladas anuales de hidrógeno a partir de energía solar para su utilización en el transporte, con el objetivo de reducir las emisiones de CO2 de la isla en más de 20.000 toneladas al año.

Otro significativo proyecto en el que participa es ShineFleet, cuyo objetivo es encontrar soluciones tecnológicas basadas en el hidrógeno para la movilidad sostenible de flotas de transporte pesado. Este proyecto, que se lleva a cabo asimismo a través de un consorcio de empresas españolas, producirá hidrógeno renovable a partir del reformado de biogás o bioetanol; o hidrógeno azul a partir del reformado de gas natural con secuestro y captura de carbono.

Descarbonización

El mismo concepto globalizador y de colaboración empresarial que Técnicas Reunidas aplica a sus iniciativas de economía circular está presente en sus actuaciones más directamente focalizadas en la descarbonización.

Un ejemplo de ello es el acuerdo cerrado hace unos meses con Acerinox para trabajar conjuntamente en el estudio de la descarbonización de la planta integral de producción de acero inoxidable que esa compañía posee en Los Barrios (Cádiz). El objetivo es identificar las tecnologías de descarbonización que resultan más adecuadas para cada subproceso industrial de la planta, prestando especial atención a la eficiencia energética, la electrificación a partir de energías renovables, el hidrógeno verde y azul, las bioenergías, o la captura y almacenamiento de carbono.

Otra iniciativa de parecida naturaleza es el acuerdo suscrito por Técnicas Reunidas y Repsol hace asimismo unos meses para desarrollar nuevas tecnologías de descarbonización impulsando la economía circular. Entre los proyectos que se contemplan en el marco de este acuerdo está un nuevo proceso de producción de plásticos a partir de plásticos usados y la optimización de la eficiencia energética de complejos industriales a través de la recuperación de calor residual. Además, ambas compañías se proponen ofrecer sus conocimientos, recursos de I+D y experiencia industrial a otras empresas, especialmente a pymes, para favorecer la transición energética en el tejido industrial español.

Esta misma aproximación global se refleja en una iniciativa pionera puesta en marcha por la compañía hace seis meses: el diseño de un marco específico para financiar las actividades que desarrolla en el ámbito de la descarbonización y la transición energética. Este proyecto, denominado Harvest, incluye una metodología cuya aplicación permitirá establecer en qué medida un nuevo proyecto de Técnicas Reunidas está o no alineado de manera estricta con los objetivos de descarbonización y transición energética. Aquellos que lo estén, serán incluidos en los diversos instrumentos de financiación asociados a la transición energética que la compañía utilice en el desarrollo de sus negocios.

Los proyectos de Técnicas Reunidas a los que se aplicará esta metodología incluirán tecnologías de bajo contenido en carbono, como el hidrógeno azul y verde, el secuestro y captura de CO2, las actividades a lo largo de la cadena de valor del gas natural como fuente de energía de transición, los biocombustibles y las instalaciones de producción de electricidad con biomasa, así como otras actividades relacionadas con la economía circular.

En definitiva, Técnicas Reunidas ha declarado públicamente su compromiso de orientar todos sus proyectos presentes y futuros al cumplimiento de los objetivos de la descarbonización y la transición energética, tanto en lo que se refiere a su negocio tradicional como a los nuevos ámbitos en los que está presente, a través de todo tipo de esquemas de trabajo, es decir, proyectos propios, acuerdos con otras compañías y formas de colaboración público-privada.