15 Aniversario
Una recuperación fuerte y sostenida
- Nos hemos enfrentado a una terrible pandemia para la que no había manual de instrucciones, y hemos afrontado juntos retos que parecían imposibles
Nadia Calviño
Madrid,
La realidad económica de nuestro país ha cambiado mucho desde que elEconomista salió por primera vez de la imprenta hace 15 años.
Poco después del nacimiento de este diario, España atravesó una durísima recesión, resultado de la crisis financiera internacional pero también de la acumulación de desequilibrios internos. Fruto de la respuesta de política económica, tardamos alrededor de diez años en recuperar los niveles previos de PIB y empleo, pero en muchos otros aspectos, como la desigualdad o la pobreza infantil, nunca llegamos a recuperarnos del todo de esa crisis, con un impacto estructural.
Sin embargo, nada puede compararse con lo que hemos vivido durante los últimos 21 meses. Desde marzo de 2020, nos hemos enfrentado a una terrible pandemia para la que no había manual de instrucciones, y hemos afrontado juntos retos que parecían imposibles.
Podemos sentirnos orgullosos, como sociedad y como país, de la respuesta dada, tanto en el plano sanitario como en el económico y social
Si analizamos las decisiones tomadas con perspectiva, creo que podemos sentirnos orgullosos, como sociedad y como país, de la respuesta dada, tanto en el plano sanitario como en el económico y social.
Las medidas de política económica que hemos tomado, a nivel nacional, europeo y global, han permitido proteger el tejido productivo, el empleo y las rentas de las familias y garantizar así una base sólida para la recuperación económica.
Puede parecer obvio, pero creo que siempre es más eficiente y asequible proteger lo que se tiene en lugar de dejar que se destruya para después tener que reconstruirlo desde cero.
Las medidas que hemos adoptado, desde los avales del ICO a los ERTEs, pasando por la prestación para los autónomos y las medidas de apoyo a la solvencia empresarial, con un importante impacto fiscal, han evitado una crisis financiera global y un enorme daño social que hubiese aumentado aún más las desigualdades en nuestro país.
Afortunadamente, gracias a la vacunación, la economía española ya está en una fase diferente. Hay una fuerte recuperación en marcha y las perspectivas son positivas.
Ahora se trata de lograr que no sea un rebote pasajero sino una recuperación fuerte y sostenida. Y para eso, para tener una salida muy diferente a la de la crisis anterior, es fundamental desplegar el Plan de Recuperación.
Este Plan permitirá abordar inversiones de hasta 140.000 millones de euros, una cifra equivalente a lo que nuestro país ha recibido en fondos estructurales desde nuestra adhesión a la Unión Europea, y reformas estructurales, transformadoras.
Se trata de una oportunidad única para modernizar nuestro país e impulsar una reindustrialización en clave verde y digital. También para reforzar la cohesión social y territorial e impulsar la igualdad de género.
Hemos avanzado mucho durante los últimos tres años en esta agenda de futuro, pero todavía hay un largo camino por recorrer y la cooperación de todas las administraciones y del conjunto de la sociedad es fundamental para tener éxito. Es hora de mantenernos unidos, de orientar bien el ciclo que ahora se inicia y seguir remando juntos, con el Plan de Recuperación como hoja de ruta para una recuperación justa.