Telecomunicaciones y tecnología

La batalla por una ley británica de privacidad llega al absurdo



    LONDRES (Reuters) - Un juego de persecuciones cada vez más absurdo entre los medios y los famosos británicos, los usuarios de Twitter y la justicia ha hecho que el primer ministro británico, David Cameron, prometiera el lunes revisar las leyes de privacidad del país.

    Los medios británicos llevan semanas luchando contra las "súper órdenes" cada vez más utilizadas por los ricos y famosos. Se trata de órdenes judiciales que impiden la publicación de historias poco favorecedoras e impiden a los periodistas informar siquiera de que existe la prohibición.

    Un diario escocés, sujeto a una legislación distinta, publicó el domingo una fotografía de un futbolista de un club inglés sobre un artículo afirmando que es "insostenible" impedir a los periodistas mencionar su nombre cuando éste aparece en centenares de mensajes de Twitter, así como que los famosos sigan utilizando órdenes judiciales para ocultar escándalos sexuales.

    Seguidores de un equipo rival abuchearon al jugador durante un partido este fin de semana, añadiendo fuego a las protestas por sus esfuerzos por mantener el anonimato.

    "Es bastante insostenible, esta situación, en la que los periódicos no pueden imprimir algo de lo que claramente está hablando todo el mundo", dijo Cameron en una entrevista por televisión.

    "El peligro es que en la práctica, las decisiones (judiciales) están escribiendo una nueva ley, que es algo que corresponde al Parlamento", añadió, riéndose ante la pregunta de si sabía qué estrella del fútbol está en el centro de la polémica mediática.

    El periódico Scotland's Herald publicó el domingo una fotografía del futbolista con una banda negra sobre los ojos y la palabra "censurado" en mayúsculas. Escocia tiene su propio sistema legal, lo que complica un proceso contra el diario.

    Los periódicos ingleses llevan semanas respondiendo a las prohibiciones obtenidas por varios famosos, como actores y otros deportistas, haciendo referencias aparentemente anodinas a ellos en las columnas de sociedad, sabiendo que muchos lectores lo habrán leído en Internet e identificarán los comentarios mordaces ocultos en los textos.

    Los abogados que defienden al jugador también han acudido a un tribunal londinense para pedir a la red de microblogs Twitter, con sede en Estados Unidos, que entregue información sobre los usuarios de la red que publicaron detalles sobre su vida privada.

    Los intentos de los famosos británicos por mantener el secreto sobre su vida privada utilizando estrictas órdenes judiciales se han visto socavados por usuarios de Twitter, que han escrito las acusaciones en la página.

    También los políticos han acudido al privilegio parlamentario para revelar que el ex responsable del Royal Bank of Scotland Fred Goodwin había obtenido una de estas órdenes judiciales. Goodwin fue muy criticado por recibir una generosa pensión a pesar de que su banco requirió un rescate del Estado.

    Los críticos, entre los que se cuentan tabloides que se alimentan de escándalos y cotilleos de famosos, afirman que se está utilizando a los tribunales como una forma de sofocar la libertad de expresión y para proteger a los famosos del escrutinio público. Los partidarios de estas órdenes judiciales afirman que protegen el derecho a la privacidad de la gente.

    Uno de los principales jueces británicos recomendó el viernes que se instruya a los medios por adelantado sobre la aplicación de órdenes que les obliguen a censurar.

    El primer ministro escocés, Alex Salmond, dijo el lunes que el Herald no debería ser perseguido bajo las leyes inglesas por publicar la foto del jugador.

    "A mí me parece que la ley inglesa, las órdenes inglesas parecen cada vez menos prácticas en el mundo moderno", señaló Salmond, un nacionalista y que dirige el Gobierno escocés.

    "Parece que todo el mundo está a destiempo, menos los tribunales ingleses", dijo a BBC Radio.