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La banda ancha fija en España destaca entre las más costosas de Europa



    España se encuentra en el pelotón de los países europeos con precios más costosos de banda ancha fija, en comparación con el nivel adquisitivo de sus habitantes. En concreto, el mercado español se encuentra en el puesto 21 del ranking europeo, muy lejos de sus vecinos del centro y norte del continente. En todo el mundo, España ocupa el puesto 32.

    Los anteriores datos los acaban de aportar los expertos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU), a través de su última métrica sobre el estado de la sociedad de la información en el mundo.

    En dicho censo, España dispone de un índice medio de 1,3, en porcentaje respecto a una serie de variables relacionadas con el nivel de renta y el Producto Interior Bruto del país. Al frente del escalafón se encuentra Suiza, con un índice del 0,6%, empatado con Luxemburgo y Andorra. Reino Unido y Noruega coinciden con un 0,7%, por delante de Francia (0,8) y Suecia (0,8). El top ten lo completan Holanda, Chipre y Bélgica.

    Ofertas paquetizadas

    De la misma forma, el precio medio de la banda ancha fija española ronda los 33,5 dólares, también entre los más altos del continente, si bien conviene ponderar que la velocidad media de conexión fija que ofrece España es superior a la media de sus vecinos. Asimismo, el mercado español se caracteriza por la creciente integración de servicios bajo la misma factura (como telefonía fija, móvil, banda ancha fija y móvil además de TV de pago), con un total de 3,5 millones de accesos paquetizados. Obviamente, los precios de la banda ancha en España resultan más elevados de la media porque, de forma mayoritaria, incluyen otros servicios adicionales.

    Según informa la ITU, "el análisis de las tendencias de los precios de la banda ancha en más de 160 países muestra que en los cuatro años transcurridos entre 2008 y 2012, los precios de la banda ancha fija disminuyeron globalmente un 82%, de 115,1% de la renta nacional bruta por habitante en 2008 a 22,1% en 2012". Asimismo, las mismas fuentes oficiales apuntan que "el precio medio por unidad de velocidad (Mbps) también disminuyó significativamente entre 2008 y 2012, con un precio medio global de 19,50 dólares por Mbps en 2012, casi la cuarta parte del precio facturado en 2008". El objetivo mundial de asequibilidad de la banda ancha, establecido por la Comisión de la Banda Ancha para el Desarrollo Digital de la de Unesco en 2011, "tiene por objeto conseguir que el coste del servicio básico de banda ancha sea inferior a 5% del ingreso mensual medio".

    Respecto a la banda ancha móvil, España ocupa el puesto 38 del mundo en la categoría de postpago, mientras que en el segmento de prepago, el precio de las conexiones se aleja hasta el puesto global número 44.