Sociedad
¿Qué le puede pasar ahora a José Bretón?
Custodiado noche y día, José Bretón se enfrenta a un oscuro futuro, aun cuando todavía no se ha dirimido la autoría de la muerte de sus dos hijos. Procesado por detención ilegal de dos niños, sin juicio a la vista podría responder con 16 años de cárcel. Con pruebas, entre 30 y 40 años. ¿Qué le puede pasar? |Bretón niega ser culpable: "Es aberrante".
En el último encuentro con su esposa -en la cárcel- quiso cambiar de indumentaria al comprobar la visita 'inesperada' de Ruth. A través de un locutorio, a ella le habló de amor, le suplicó una reconciliación. Vulnerable, Bretón no mencionó sin embargo el paradero en el que se encuentran los niños Ruth y José. La cita fue calificada de fallida por la Policía.
Veinticuatro horas después de la desaparición de los pequeños, José mostraba su pesar a su hermana Catalina: "¡Que mala suerte que me haya tocado a mí tener que enterrarlos, con lo bonitos que son!", narran los relatos de entonces. Desde aquel día, Bretón no ha cambiado ni un ápice su estrategia. Se reafirma en su inocencia. Paradoja o no, desde aquel fatídico mes de octubre de 2011 Bretón está marcado. Es el único sospechoso de la desaparición de los sus hijos.
El oscuro devenir de Bretón
Ocho meses de investigación cercan el devenir de aquel hombre que un día decidió marchar a una misión militar en Bosnia, otro vender coches, y otro casarse con una veterinaria. Ocho meses que hoy le señalan por detención ilegal agravada por tratarse de menores, y que sin más cargos que contar podría significar 16 años de cárcel.
Desde el pasado lunes, este trance carcelario se antoja mayor. El hallazgo de huesos -posiblemente de niños- en la finca Las Quemadillas podría ser determinante. Si bien es cierto que el ADN facilitaría su ingreso en prisión, sin embargo no es una prueba imprescindible. Se puede llegar, a través de otros indicios, a la conclusión de que los restos encontrados en este lugar familiar corresponden a los dos hermanos. De ser así José Bretón no se escaparía de las rejas, con agravante de doble parricidio, lo que en roman paladino podría traducirse entre 35 y 40 años.
El deseo de venganza
Solo en 2012, recuerda la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas, en España han muerto tres niños en estas circunstancias. Con Jose y Ruth la suma se elevaría a cinco. Desde 2002 han muerto asesinados 62 menores. Y siempre hay un denominador común, afirma Ana María Pérez del Campo, presidenta de esta asociación: "estos crímenes suelen producirse cuando la mujer comunica su deseo de divorciarse o tiempo después de que la ruptura se haya producido, por deseo de venganza".
Amén de los 'errores' de la Policía Científica, el caso Bretón no concluirá hasta que no haya sentencia firme.