Política

El PSOE 'ataca' a los sindicatos y Rajoy subvenciona a UGT y CCOO con 48 millones

    Cándido Méndez (UGT) e Ignacio Fernández Toxo (CCOO). <i>Archivo</i>


    Envueltos en plena polémica por corrupción, la situación de los sindicatos es delicada. La desconfianza generada entre los ciudadanos se traduce, según el Partido Socialista en una reducción en dos años del 33% de trabajadores amparados por sus convenios. Mientras el PSOE cuestiona su utilidad, el Gobierno de Mariano Rajoy otorgó ayudas por un total de 48 millones de euros para la subvención de cursos de formación de 'ocupados'.

    Según publica Vozpópuli, el exministro de Trabajo socialista Valeriano Gómez ha señalado en un informe lo que para él es la mayor consecuencia de la reforma laboral: casi cuatro millones de trabajadores en activo, el 33%, han dejado de estar amparados en los dos últimos años por un convenio colectivo. Si en 2011 había 11 millones amparados, en 2012 descendieron hasta los nueve, cifra que para 2013 se prevé que se convierta en siete.

    Aunque el Ministerio de Empleo ha negado que estos datos sean ciertos, de serlo pondrían en tela de juicio la utilidad que hoy en día tienen los sindicatos ya que su influencia habría quedado limitada a menos de la mitad de los 16 millones largos de ocupados. Que han perdido influencia en la negociación colectiva es evidente, pero los esfuerzos de Cándido Méndez (UGT) e Ignacio Fernández Toxo (CCOO) por conseguir que el Gobierno les ofreciese un mayor margen, habrían quedado ahora en evidencia.

    La subvenciones de UGT y CCOO

    Mientras tanto, Fátima Báñez ha publicado el detalle de las ayudas de 2012 del Ministerio de Empleo a ambos sindicatos según las cuales sólo el Instituto de Formación de Estudios Sociales (IFES) -propiedad de UGT-, acusado de servir de financiación a UGT, percibió 356.940 euros del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Por su parte, las centrales obtuvieron cerca de 50 millones (48.286.038,86 euros). Precisamente el IFES era contratado por UGT para impartir cursos de formación subvencionados por el Estado y las comunidades autónomas. La cuestión es si ese dinero se usaba para lo que había sido asignado o terminaba en la caja única del sindicato.

    El dinero otorgado por al cartera de Báñez no llegó sólo a las matrices de los sindicatos sino que también alcanzó a sus delegaciones territoriales, institutos y fundaciones afines. Así, CCOO recibió 3,8 millones a los que se suman las ayudas que obtuvieron su federación de Comercio, Hostelería y Turismo (4,9 millones), la de Construcción, Madera y Afines (400.000 euros); la de Industria y Textil (más de un millón); la agroalimentaria (2,4 millones) entre otras.

    Por su parte, UGT recibió 3.359.777 euros del Gobierno además de los beneficios de sus federaciones: la estatal de Servicios con 250.000 euros; la de Industria y Trabajadores Agrarios, con 4,1 millones; la de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego, con 5,58 millones...