Política

Corinna Wittgenstein: "Si alguien quiere utilizarme contra la Familia Real que no cuente conmigo"

    Corinna zu Sayn-Wittgenstein. <i>Imagen: Archivo</i>


    La alemana Corinna Wittgenstein, salpicada por los correos que Diego Torres, el exsocio de Iñaki Urdangarin, entregó al juez Castro sobre el 'caso Nóos', ha vuelto a hablar. Tras admitir que ayudó al duque de Palma a encontrar un trabajo en la Fundación Laureus, este lunes defiende que si alguien quiere utilizarla contra la Familia Real "que no cuente conmigo". "Nunca he recibido ni un solo euro de los españoles", añade Corinna Zu Wittgenstein. Las primeras palabras de la alemana.

    "No pienso volver a España mientras mi presencia allí cause controversia. Nunca he recibido ni un solo euro de los contribuyentes españoles. He ayudado gratis al Gobierno español y me han pagado algunas empresas privadas que querían expandirse globalmente", reafirma la mitad alemana mitad danesa, quien, desde su despacho en Mónaco, ha concedido una entrevista a El Mundo.

    La complicación de una rubia

    Corinna Wittgenstein aclara que "su colaboración con el Gobierno español fue cuando se le ha pedido", y matiza, "ha sido siempre delicada y confidencial". "Son asuntos clasificados, situaciones puntuales que ha ayudado a solucionar por el bien del país", indica.

    Además, enfatiza en su manera de trabajar: "La confianza y la reputación es muy importante en el tipo de trabajo que hago. Estoy en una liga de los grandes y competir ahí es duro. Ser mujer y ser rubia, complica aún más las cosas", remarca.

    La decepción de Corinna

    "El Rey me pidió que ayudara a Iñaki a encontrar empleo apropiado en una organización internacional y reconocida -se justifica-. Cuando no aceptó la oferta de Laureus - subraya Corinna Zu Wittgenstein, una de las protagonistas de los correos entregados por Diego Torres, el exsocio de Urndangarin al juez Castro-, me sentí muy decepcionada".

    Corinna se muestra segura de sí misma y se defiende. "Yo no voy a atacar a nadie, pero tampoco voy a dejar que lo hagan conmigo". Y detalla a propósito de este episodio que, cuando Iñaki Urdangarin no aceptó la oferta de Laureus, "eso me dejó a mí en una posición muy incómoda dentro de la Fundación".

    'Golden boy'

    "Su Majestad le dijo a Iñaki que me llamara y que viniera a verme. Así lo hizo en junio de 2004. Vino a Londres a cenar conmigo para discutir ideas sobre un futuro trabajo -relata-. Era la primera vez que hablaba con él de verdad. A finales de los años 90, después de su matrimonio con la infanta, había coincidido con él en algunos actos sociales, pero nunca había hablado con él", precisa.

    "Su perfil -desarrolla su exposición- me pareció perfecto para el trabajo de Laureus. Entonces era un auténtico golden boy: un atleta olímpico con dos medallas, Atlanta y Sidney, y miembro de una Familia Real europea por su matrimonio con la infanta Cristina. Pero fue él el que me buscó a mí y él  el que estaba interesado en la Fundación Laureus".

    El Instituto Nóos

    Preguntada sobre su conocimiento del Instituto Nóos, Corinna Zu Wittgenstein asegura que no sabe lo que era. "Por lo que él me explicó, era una fundación de caridad. Sonaba bastante normal, hablaba mucho del desarrollo de las ciudades. Tenía todo el sentido del mundo que quisiera progresar en el universo de las fundaciones y presidir una destacada e internacional como Laureus. Francamente, al Instituto Nóos no lo conocía nadie fuera de España".

    Así que, continúa la princesa alemana, "se pasó meses intentando conseguir ese trabajo. Mirándolo ahora, le habría ido mucho mejor si lo hubiera aceptado. Le venía al dedo por su posición, pero ahora creo que no era suficiente para él. Laureus no era el dorado".

    Y respecto a su participación al Valencia Summit, aclara: "Fuimos en equipo para ver lo que estaba haciendo Iñaki, a lo que se dedicaba, y también para estudiar posibilidades de Valencia como lugar preferido para celebrar la entrega anual de los premios deportivos de Laureus, aunque al final no salió".