Política
Ignacio González subió un 44% el gasto del Canal en publicidad para 'ayudar' a la prensa
Ignacio González, el sucesor de Esperanza Aguirre al frente de la Comunidad de Madrid, ha intentado a toda costa tener contenta a la prensa regional durante su última etapa como vicepresidente autonómico y máximo responsable del Canal de Isabel II. En pleno plan de ajuste en la región, con recortes que afectan a todos los sectores, especialmente a la educación y la sanidad, González incrementó en más de un 44 por ciento el gasto presupuestado para este año en publicidad, propaganda y relaciones públicas, hasta superar los 14 millones de euros.
El dato es especialmente relevante, porque hay que tener en cuenta que el pasado ejercicio esta partida, que incluye también el pago de suscripciones a periódicos y revistas, fue de sólo 9,7 millones de euros y que el incremento se produce en un momento muy complicado, no sólo para Madrid, sino para toda la economía nacional, inmersa en un severo plan de ajuste para contener el déficit y cumplir con Bruselas.
Una portavoz del Canal de Isabel II ha explicado a este periódico que la cifra se presupuestó en verano de 2011, y que lo lógico es que no se cumpla, dado los recortes puestos en marcha. No obstante, fuentes de la oposición insisten también en que "cuando se aprobaron los presupuestos, ya se estaba produciendo un agravamiento de la situación financiera e Ignacio González era plenamente consciente de lo que hacía".
Una de las razones que explicaría este fuerte incremento del gasto en publicidad estaría en que el nuevo presidente de la Comunidad de Madrid quería tener todo atado de cara a la privatización de la compañía pública.
Salida a bolsa
La intención inicial del Gobierno autónomico, según anunció antes del verano el hasta ahora vicepresidente regional, era abordar el proceso de privatización del Canal de Isabel II antes del verano, algo que finalmente no ha sido posible.
Tanto González como la ya expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, han asegurado en reiteradas ocasiones que la crisis no iba a ser un obstáculo para la privatización del Canal de Isabel II, ni tampoco para encontrar inversores.
Según dijo, por ejemplo, Aguirre el pasado mes de abril, el Canal "ofrece una rentabilidad segura porque todo el mundo consume agua. El abastecimiento y suministro es un servicio público esencial para un bien imprescindible, lo mismo que sucede con la luz, el gas o la electricidad".
La intención del Ejecutivo regional sigue siendo colocar en bolsa el 49 por ciento de las acciones con el objetivo de poder afrontar futuras inversiones y modernizar la empresa. "Creemos que se puede encontrar en la bolsa y en los fondos de inversión personas, físicas o jurídicas, interesadas en participar en el accionariado ", manifestó Aguirre.
De acuerdo con los presupuestos aprobados, el Canal de Isabel II alcanzará este año una facturación neta de 798,5 millones de euros. Esta cifra supondrá un crecimiento del 4,4 por ciento respecto a los 764 millones de euros que ingresó el pasado ejercicio.
Pese al fuerte incremento de la partida prevista para publicidad y relaciones públicas -en conjunto los gastos de explotación aumentarán algo más del 4 por ciento-, tal y como dice Aguirre, el Canal de Isabel II continúa siendo una empresa rentable.
Beneficios a la baja
La compañía alcanzó el pasado ejercicio un beneficio después de impuestos de 118 millones y el objetivo para este año es superar los 114 millones. Uno de los principales escollos a la hora de abordar la privatización es que la deuda de la compaía se eleva a 1.523 millones de euros -1.312 millones son a largo plazo y el resto a corto-, aunque hay que tener también en cuenta que, pese a todo, sigue siendo una compañía saneada porque sus fondos propios superan los 2.398 millones de euros.
Frente a los planes del Gobierno popular de la Comunidad de Madrid, el líder de los socialistas en la región, Tomás Gómez, se ha mostrado siempre en contra de la privatización del Canal de Isabel II porque, en su opinión, ésto significará "la subida de tarifas para todos los madrileños".
"El Canal tiene potencia económica suficiente para hacer las inversiones necesarias y oportunas en esta región. Privatizarlo sólo sig- nifica dar a unos pocos lo que es de todos, significa la subida de las tarifas para todos los ciudadanos y convertir a Madrid un poco más en ese Madrid Sociedad Anónima que tiene el Partido Popular en la cabeza", aseguró hace unos meses el líder de la oposición regional.
Habrá que ver ahora si González continúa adelante o no con los planes, teniendo en cuenta que las cuestiones económicas no están ni mucho menos resueltas y que cada vez resulta más complicado encontrar inversores.