Zapatero y Rajoy se reunirán mañana en el Palacio de la Moncloa
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, se reunirán mañana en el Palacio de la Moncloa para analizar la situación económica en España derivada de la crisis financiera internacional. Ambos cerraron la entrevista en una conversación telefónica mantenida esta mañana.
El encuentro tendrá lugar después de que el jefe del Ejecutivo regresara anoche de París tras participar en la reunión de los jefes de Estado de la eurozona. La reunión que mantendrán será
la décima desde el año 2004 y la segunda de la legislatura.
Temas a tratar
La entrevista entre Zapatero y Rajoy se ha fijado para las 17.30 horas, y en ella se analizarán, entre otros asuntos, las medidas acordadas ayer en la capital francesa por los representantes de los países de la zona euro para hacer frente a la crisis.
Tras participar en esa reunión, Zapatero ya avanzó que tenía intención de ponerse en contacto hoy mismo con el presidente del PP para detallarle esas medidas, que se aprobarán en un Consejo de Ministros extraordinario que se ha convocado para esta mañana. El presidente del Gobierno había expresado semanas atrás su deseo de reunirse con Rajoy para analizar la situación económica, y el líder del PP mostró su disposición a ello siempre que, previamente, hubiera contactos entre los equipos económicos de ambas partes.
La semana pasada se hicieron efectivos esos contactos y se reunieron el vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, y el vicesecretario de Economía del PP, Cristóbal Montoro.
Diez reuniones
Con la cita de mañana, Zapatero y Rajoy se habrán visto dos veces en privado en menos de tres meses, tras la reunión celebrada el 23 de julio pasado, en la que ambos alcanzaron varios puntos de acuerdo en temas como la política antiterrorista o la renovación de los órganos judiciales, pero que acabó con un profundo desencuentro en materia económica.
Antes de ese contacto, hacía algo más de un año que no se reunían, en concreto desde el 11 de junio de 2007, un encuentro en el que ambos dieron por sentadas las bases para intentar recuperar paulatinamente y sin condiciones la confianza mutua y la unidad frente a la banda terrorista tras el anuncio de la ruptura del alto el fuego por parte de ETA.
Atentado en la T-4
Con anterioridad se habían reunido el 8 de enero del año pasado, nueve días después de que ETA colocara una furgoneta bomba en el aparcamiento de la T-4 del aeropuerto de Barajas, una explosión que costó la vida a dos ciudadanos ecuatorianos. Entonces, Zapatero y Rajoy no consiguieron llegar a ningún acercamiento en materia antiterrorista y finalizaron la reunión con reproches mutuos sobre sus respectivas actuaciones.
Aquel encuentro fue precedido por otro celebrado sólo unos días antes, el 22 de diciembre de 2006, en el que Zapatero y Rajoy volvieron a escenificar su desacuerdo sobre el proceso de paz. Ese mismo año ambos celebraron otra entrevista, el 28 de marzo, tras el anuncio de alto el fuego de ETA, y sirvió para que Zapatero y Rajoy constataran que habían dado pasos para recuperar la confianza en materia antiterrorista.
Elecciones generales
Hasta en cuatro ocasiones más se reunieron el presidente del Ejecutivo y el líder de la oposición en la anterior legislatura: el 24 de mayo y el 7 de septiembre de 2004, y el 14 de enero y el 5 de septiembre de 2005. El diálogo sobre la reforma de la Constitución y los estatutos de autonomía centró el primer encuentro que mantuvieron Rajoy y Zapatero, con este último ya en el Palacio de la Moncloa tras ganar las elecciones generales del 14 de marzo de 2004.
La segunda, el 7 de septiembre de 2004, sólo sirvió para que ahondaran en sus diferencias respecto a las reformas territoriales y la tercera -el 14 de enero de 2005- se ocupó del Plan Ibarretxe, cuya toma en consideración se debatía unos días después en el Congreso de los Diputados y que fue rechazada. En el encuentro que celebraron en septiembre de 2005, los temas principales fueron la política antiterrorista, la reforma de los estatutos y la política exterior, y se cerró con invitaciones al diálogo, acuerdo y reflexión.