El PP recurrirá a Aznar para captar el voto del sector más radical del partido en las europeas

De cara a las elecciones europeas del 25 de mayo, el PP ha ofrecido una actitud muy pasiva en lo referente a la identidad del candidato. Sin embargo, de puertas hacia dentro, la actividad en Génova cada vez es más intensa, y ya se perfila la estrategia del partido en la campaña. Y el arma secreta de los populares es un viejo conocido, el expresidente del Gobierno José María Aznar.

Tal y como publica Vozpópuli, el PP quiere recurrir al expresidente con un objetivo claro: ganar votos entre el espectro más radical del partido. La ruidosa llegada de Vox al panorama político español tiene que ver con esta táctica, pero el motivo de ésta es otro: recuperar a los votantes de la vieja guardia, los más radicales y  decepcionados con el PP. Unos votantes que serán clave, según se desprende de los resultados de las encuestas.

Esta parte del electorado se siente herida por las políticas populares en asuntos tan espinosos como el terrorismo y la relación con la víctimas, los impuestos o el paro. Y contra este clima, mezcla de escepticismo y enfado, el PP pretende que Aznar logre reconducir la situación y llevar a Génova unos votos que pueden ser claves para la victoria en las europeas.

Una relación tirante

Pese a los deseos del PP para usar a Aznar como arma electoral, su relación con Mariano Rajoy no pasa por su mejor momento. En los últimos actos públicos de Aznar, el Ejecutivo de Rajoy no ha arropado al expresidente, que como respuesta por estos plantones no acudió a la convención del PP en Valladolid.

A pesar de este inconveniente, en el PP no se espera una negativa por parte de Aznar. Siempre que se le ha pedido ayuda, ha respondido afirmativamente, y los populares creen que volverá a ocurrir lo mismo en esta ocasión.

No pasará lo mismo con Jaime Mayor Oreja. El exministro, dolido porque no se le ha tenido en cuenta para las europeas, está mucho más distanciado de la cúpula del partido. Aunque el PP quiere contar con él para la campaña, su participación se puede limitar a algún mitin y su cabeza se centra más en cómo encaminar su carrera en el ámbito privado.