El presidente abre la puerta a reformar la Constitución

Era imposible que la consulta soberanista dejara de tener presencia en el discurso del presidente del Gobierno en el último Debate sobre el Estado de la Nación. A ella se refirió Mariano Rajoy en los términos habituales, tachándola de ilegal e irrealizable dentro de la legislación vigente. Sin embargo, el jefe del Ejecutivo subrayó que el marco legal actual sí que "permite que la Constitución pueda ser reformada", como ya ha ocurrido en dos ocasiones anteriores, y que él mismo se mostraba "dispuesto al diálogo" sobre este asunto. EN DIRECTO | Segunda jornada del debate sobre el estado de la Nación.

Ahora bien, Rajoy dejó claro que sólo concibe modificaciones de la Carta Magna que estén previstas por ella misma o, dicho en sus propias palabras: "Todos cuantos pretendan su modificación pueden plantearla, pero siguiendo los pasos y reglas que la misma Constitución establece; eso es el Estado de Derecho".

Incluyendo ésta, Rajoy invocó en tres ocasiones la noción de "Estado de Derecho" en el largo fragmento de su discurso dedicado a la deriva soberanista en Cataluña. De este modo, el propósito del presidente era llevar la cuestión lejos del terreno de las diferencias políticas o identitarias y entenderla, preferentemente, como una ruptura del sistema de protección legal que ampara a los ciudadanos.

Así, el presidente quiso mostrarse como el líder de un Gobierno que "está preocupado, y mucho, por la suerte de todas las personas que viven en Cataluña, cuyo bienestar y futuro están en riesgo", hasta el punto de que resulta imposible mostrarse "indiferente" ante el cariz que ha tomado la apuesta soberanista del presidente de la Generalitat.

Aún hubo otras dos ocasiones en las que Rajoy quiso poner de manifiesto que no otra cosa sino el "bienestar y el progreso de los catalanes" es aquéllo por lo que va a seguir peleando durante el tiempo que permanezca en el Gobierno.

El presidente quiso volver a mostrarse pragmático cuando llegó la hora de explicar por qué defiende el ideal de la unidad de España. Además de apelar a "una tradición, una memoria y un patrimonio comunes", dejó claro que, si por algo merece la pena que el país se mantenga unido, es debido a que "nos conviene; juntos estamos mejor".

Adelanto y prosperidad

Y añadió: "No es que los países adelantados opten por la unidad, sino que la unidad hace que los países adelanten. No es la prosperidad lo que los une, sino al revés: es la unidad la que los hace prósperos".

Y Rajoy continúo recurriendo a términos y argumentos económicos cuando, a renglón seguido, aseguró que "España es la mejor plataforma para construir un futuro de oportunidades para todos". Es más, según puso de manifiesto el jefe del Ejecutivo, "todos los españoles conformamos una gran alianza estratégica para competir desde Europa con el mundo entero: una sociedad fuerte, una cultura plural y diversa que a todos nos enriquece, una democracia avanzada y un capital humano de 47 millones de personas".