Política

Rajoy desvela desde Japón que no sabe qué es la tercera vía catalana

    Mariano Rajoy, presidente del Gobierno. <i>Imagen: Archivo</i>


    Hasta el país del sol naciente persiguió este jueves a Rajoy el asunto catalán. A Tokio, donde se cumplía su último día de visita oficial, llegaron los ecos de la llamada tercera vía planteada por el portavoz del CiU Josep Antoni Duran i Lleida, y apoyada por el PSC, que aboga por la consulta pero no por la independencia.

    Y el presidente de Gobierno prefirió sortear el tema. Dijo no entender en qué consistía "exactamente" pero sí dejó claro que era partidario del Estado autonómico. "Soy partidario primero de la ley, después del diálogo, de la lealtad y de la cooperación entre todos", fueron sus palabras. España es "el país más viejo de Europa" y ha vivido con Cataluña siempre, enfatizó.

    Declaraciones más contundentes pudieron oírse ayer en nuestro país. En concreto, las de la flamante presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, que se presentó en un acto en Madrid exhibiendo buenas dosis de autocrítica: "No fue un acierto" que el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero se comprometiera a aceptar "cualquier texto del Estatut que viniese de Cataluña", aseguró. Y se preguntó si alguien pensó que "no iba a pasar nada" después de que el Tribunal Constitucional se pronunciara sobre este texto, que había sido aprobado por las Cortes Generales y ratificado por los ciudadanos catalanes.

    "Lo que ha pasado nunca debimos consentirlo", afirmó Díaz ante el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el líder de los socialistas catalanes, Pere Navarro, entre otros asistentes al desayuno de Nueva Economía Forum.

    También criticó al PP, al decir que tampoco fue un acierto "iniciar una ola de anticatalanismo por toda España, recogiendo firmas contra un Estatuto que además iba dirigido exclusivamente a captar votos a cualquier precio". Parte de culpa hemos tenido todos", insistió la presidenta andaluza, que añadió que, ahora, lo que hay que hacer es "reconducir" la situación y desmontar "la trama del derecho a decidir". "¿Derecho a decidir qué? ¿La independencia de Cataluña? Ese derecho no existe en ninguna Constitución del mundo", añadió Díaz.

    "Cataluña tiene motivos para sentirse agraviada", concluyó la presidenta, "Andalucía también". Por eso abogó por reformar el sistema de financiación de todas las CCAA para hacer un reparto más justo.

    La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, aseguró que comparte "al cien por cien" el discurso de Díaz sobre Cataluña y que "el diálogo con Cataluña es imprescindible" para evitar "ir yendo a salto de mata" en este tema.

    Otro peso pesado del partido, como el alcalde de Zaragoza y exministro socialista, Juan Alberto Belloch, también expresó su apoyo a Díaz y aseguró que, con la nueva presidenta de los andaluces, "ha nacido una estrella a nivel nacional".

    El secretario general del PSM, Tomás Gómez, sin embargo, manifestó que "la culpa" de lo que está sucediendo en Cataluña con la deriva soberanista es de los "radicales", tanto de los que quieren la "separación" como de los que "quieren una España como la de la época de Franco". Para Gómez, el problema actual de Cataluña se encuentra en los "extremos".

    Llorar por las inversiones

    Por su parte, la secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, replicó a CiU que "no se puede reclamar un mayor sistema de financiación y mayor cuota para el déficit y aun encima llorar por inversiones directas", recordando que Cataluña en particular "ha incrementado continua y sistemáticamente" sus inversiones durante diez años. De esta forma respondía a los reproches del diputado de CiU Toni Picó sobre las transferencias a Cataluña, que caen un 25,46 por ciento y se quedan en 944,42 millones.