Política

El PSOE insta a la investigación del borrado de discos duros y el Gobierno elude el caso

    Óscar López, el secretario de Organización del PSOE. <i>Imagen: EFE</i>


    El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ha referido este viernes a la decisión del PP de borrar la información de los ordenadores utilizados por su extesorero Luis Bárcenas, que ha calificado como "toda una tarjeta de visita" para un partido que, según ha recordado, quiere sacar adelante la Ley de Transparencia.

    Rubalcaba se ha pronunciado así tras participar en la ciudad italiana de Génova en la cuarta reunión de líderes socialistas del sur de Europa, en la que también ha participado el primer ministro italiano, Enrico Letta.

    Según ha subrayado, el Gobierno está sufriendo un duro desgaste durante los últimos meses, pero no sólo por la crisis económica sino también por "sus mentiras". "Destruir el disco duro de un ordenador es toda una tarjeta de visita para un partido que quiere hacer una Ley de Transparencia. Curiosa forma de ser transparente negando información al juez", ha censurado después de que el juez descubriera que los dos ordenadores entregados por el PP no contenían información en sus discos duros.

    El secretario de Organización del PSOE, Óscar López, anunció hoy que su partido presentará un escrito ante el juez Pablo Ruz para solictarle que investigue el borrado y destrución de los discos duros y determine si esta formación ha incurrido en algún delito por esta razón. Mientras tanto, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha eludido este viernes pronunciarse sobre el caso. Rubalcaba pide investigar quién manipuló el ordenador de Bárcenas.

    López anunció la iniciativa judicial del PSOE en una rueda de prensa ofrecida este viernes, tan sólo media hora antes de que la vicepresidente, Soraya Sáenz de Santamaría, compareciera ante los medios por primera vez tras las vacaciones estivales.

    De hecho, el número tres del Partido Socialista dejó en el aire una pregunta dirigida a Sáenz de Santamaría a la que exigió aclarar si "su idea de transparencia" se corresponde con "la que practica su partido".

    El PSOE quiere que el juez investigue quién borró las memorias, por orden de quién, si hubo delito y si cuando la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, dijo que los equipos informáticos estaban "custodiados" en la sede popular, quiso decir que "estaban siendo manipulados".

    Los socialistas consideran que el borrado de las memorias es gravísimo y evidencia que "el PP lleva cinco años mintiendo".

    Entiende el PSOE que la actuación del partido del Gobierno podría constituir un delito de "ocultación de pruebas y obstrución a la justicia" y para asegurarse, pide al juez que invetigue.

    Para Óscar López, los populares han emprendido un "viaje a ninguna parte a lomos de la mentira y la ocultación" y podrían encontrarse con que deben afrontar responsabilidades penales por su actuación.

    El Gobierno también ha hablado

    La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha eludido este viernes pronunciarse sobre la destrucción por parte del PP de los discos duros de los ordenadores del extesorero de este partido Luis Bárcenas.

    En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sáez de Santamaría ha recordado que el caso Bárcenas está inmerso en un procedimiento judicial que "el Gobierno tiene que respetar" y, por tanto, "no puede entrar a valorar".

    Además, ha añadido, como Gobierno tampoco puede entrar a valorar las decisiones de los partidos "actuando como empresas", sea la fuerza política que sustenta al Ejecutivo o cualquier otra.

    El PP comunicó este jueves a la Audiencia Nacional que destruyó los discos duros de los dos ordenadores que Bárcenas tenía en la sede de la calle Génova y lo hizo el día en que la Policía había sido citada para que volcara el contenido de los mismos.

    La legislación no avala el borrado

    El portavoz de Jueces para la Democracia, Joaquín Bosch, ha dicho este viernes que la Ley de Protección de Datos se aplica en documentos exclusivamente personales y que en ningún caso se justifica el borrado del contenido de los discos duros de los ordenadores que estaban en la sede del PP y que el juez había requerido para sus investigaciones sobre el 'caso Bárcenas'.

    En declaraciones a la Sexta, Bosch ha insistido en que los ordenadores eran del PP y por tanto "lo más lógico" es pensar que toda la información que había eran datos pertenecientes al partido. A su juicio, "no se entiende que basándose en la ley de protección de datos personales de Bárcenas hayan sido suprimidos" los archivos.

    En este sentido ha señalado que "es posible" que el PP alegue que "no tenía constancia formal" cuando destruyeron las memorias de los ordenadores, pero ha matizado que eso no significa que no fuese un "hecho notorio" que esos ordenadores guardaban información relevante para la investigación judicial.

    En su opinión, debe ser el juez Ruz quien deba valorar si ve "indicios" de que pueda haber un "delito de encubrimiento por destrucción de pruebas", por parte del partido de Gobierno y a partir de ahí habrá que analizar se si puede imputar de un delito a una persona o personas. Cree "más difícil" que se les pueda imputar un delito de "obstrucción a la justicia".

    Preguntado por si el juez instructor de la causa, Pablo Ruz, ha tardado mucho tiempo en requerir esta información, Bosch ha manifestado se podría pensar que los ordenadores podían ser destruidos, pero que el extesorero del PP Luis Bárcenas ha tenido posturas "contradictorias" con respecto al contenido de las informaciones que poseía, y por tanto lo ha justificado.

    Bosch ha concluido reiterando que en cualquier caso las contradicciones de Bárcenas no justifican "la destrucción de pruebas", ni tampoco que no se "que no se ofrezca transparencia a la ciudadanía".