Política

El PSC provoca otro quebradero de cabeza a Ferraz: de grupo propio al la agencia tributaria catalana

    Pere Navarro. <i>Foto: EFE.</I>


    A Ferraz le crecen los enanos. A contracorriente, en la oposición y luchando contra la crisis, el PSOE no consigue convencer a los ciudadanos pese al descalabro del PP desde el pasado 20-N. El partido acaudillado por Alfredo Pérez-Rubalcaba, por si fuera poco, se enfrenta a un ERE y esta semana, además, ha visto como la polémica sobre su relación con el PSC catalán arreciaba de nuevo.

    La vieja aspiración de los socialistas catalanes de tener un grupo propio no ha sido en esta ocasión el desencadenante del problema. Este miércoles, el parlamentario Ernest Maragall, que fue consejero de Educación de la Generalitat, se desmarcaba de las directrices del grupo y votaba a favor del concierto económico y del pacto fiscal.

    En concreto, Maragall -que ya se había saltado la disciplina de voto en otras ocasiones- respaldaba la necesidad de que Cataluña disponga de una agencia tributaria propia y del control absoluto en la gestión de los impuestos que pagan los catalanes. Su grupo parlamentario, en cambio, se abstuvo.

    Pere Navarro, primer secretario del PSC, ya avanzado que el aparato de este grupo de la federación socialista, estudiará la decisión de Maragall.

    El dirigente ha recalcado en RAC1 que el PSC comparte el "diagnóstico y los objetivos" del pacto fiscal, pero no los instrumentos.

    Díalogo y balones fuera

    La portavoz del grupo socialista del Congreso, Soraya Rodríguez, asegura que el PSOE, "como no podía ser de otra forma", respeta la autonomía política del PSC, antes de subrayar que los socialistas catalanes no dieron el espaldarazo a las partes más espinosas del texto. 

    "El PSOE tiene una línea de diálogo continuamente abierta con el PSC pero respetamos la decisión y autonomía política del PSC", ha recalcado Rodríguez.

    El secretario general del partido, Rubalcaba, también muestra esta misma postura.