Opinión

Se perfilan las conclusiones de la Cumbre de Río+20

    José Luis Blasco, socio responsable de Cambio Climático y Sostenibilidad de KPMG en España


    Aunque durante el día se han filtrado diferentes documentos, las negociaciones continúan a buen ritmo bajo el impulso firme  -incluso tildado por algunos de agresivo- por parte del gobierno brasileño que trata de acordar un texto que emule, en la medida de lo posible, los avances conseguidos veinte años atrás, aquí en Rio.

    A pocas horas del comienzo del tramo de negociaciones que se denomina de Alto Nivel, Sha Zukang secretario general de la Cumbre ha adelantado esta tarde, sin que estuviera previsto, los que seguramente serán los cinco principales vectores del documento que será entregado mañana a los mandatarios que asisten a esta Cumbre.

    Indicadores globales de desarrollo sostenible

    Todavía lejos de alcanzarlos y a tres años de la finalización del periodo de vigencia de los "Objetivos del Milenio", se plantea la necesidad de diseñar un set de indicadores que permita conocer las variables macro de la evolución de lo que denominamos desarrollo sostenible. Un cuadro de mando para el mundo, y para los países, que haga tangible la idea. Aunque este sería el gran hito que daría a esta Cumbre un hueco en la Historia, en las conclusiones no se esperan encontrar los indicadores, pero si los temas a monitorizar, el proceso y los plazos en los que se diseñarán lo que se denomina en inglés Sustainable Development Goals -SDG-.

    Una definición de crecimiento verde

    Uno de los objetivos de la Cumbre era diseñar las bases que impulsarían un crecimiento verde, sin embargo, al sentarse a la mesa los negociadores descubrieron que no todos tenían la misma idea de lo que significaba. En el documento final se sentarán las bases conceptuales que permitirán hablar un lenguaje común para avanzar en la agenda en futuro.

    Informes de sostenibilidad para las cotizadas

    Desde el primer borrador que se circuló a finales de 2011 se ha mantenido la necesidad de impulsar la transparencia del desempeño empresarial en esta materia. La versión actual del documento incluye una recomendación a las empresas para su desarrollo, y no a los gobiernos para que lo regulen. Se limita a las compañías cotizadas, y no prescribe ningún estándar de reporting determinado.

    Reformas en la gobernanza ambiental

    Se tratará de establecer un foro político del máximo nivel que permita estudiar los problemas ambientales y sociales, y actuar en consecuencia. Un paso hacia lo que ya existe en el sistema de Naciones Unidas en cuestiones de seguridad -Consejo de Seguridad- o de índole económico -Banco Mundial-. En esta misma agenda se espera cambiar aquellas funciones solapadas que en la actualidad tienen diferentes organismos del sistema de Naciones Unidas, y hacerlas más ejecutivas.

    Más allá del PIB

    Existe un consenso mayoritario de la necesidad de transformar el indicador de crecimiento. El Producto Interior Bruto, no sirve para medir la prosperidad que pretende la agenda de Río.

    Desde principios de este siglo han habido diferentes intentos en esta dirección. Algunos de ellos capitaneados por ilustres premios Nobel de Economía como Stiglitz o Sen. Estos no postulaban un nuevo indicador, si no que trataban de poner de manifiesto la perversidad del mismo y su escasa utilidad del PIB como medida de la prosperidad de las naciones. Naciones Unidas ha dado ya las primeras pistas de lo que piensa puede ser este nuevo PIB verde y que ha venido a denominar índice de riqueza inclusiva -IWI por sus siglas en inglés-.

    Aunque Zukang puso en su intervención todo el entusiasmo del que fue capaz, el texto es vago y débil todavía. Y aunque cualquier Cumbre que se precie debe ser tildada, al menos en un par de titulares , como fracaso, estos primeros apuntes han sido recibidos con una sensación entre pesimista y agridulce, por la mayoría de las personas con las que he tenido ocasión de conversar esta tarde.

    Mañana nos espera un día intenso en el que conoceremos el impulso que quieren introducir al texto los mandatarios que aquí se congregan. Con el fantasma de la última noche de la Cumbre de Copenhague todavía rondando las oficinas de los negociadores, sin Obama, Merkel o Cameron, no son de esperar grandes avances. Entretanto, los contactos entre los grupos de trabajo de las diferentes delegaciones continuarán en ésta Cumbre que los aquí congregados hemos comenzado a denominar "Rio más dos horas y veinte", que es lo que se tarda en llegar a cualquier sitio en esta bonita y congestionada ciudad.