x Director de Periodismo de la Universidad CEU-UCH.E l aumento de casi el 6 por ciento en la venta de viviendas el año pasado es engañoso. Se debe, fundamentalmente, a la situación fiscal favorable que tenía la compra de una casa hasta el pasado 31 de diciembre. La desgravación tributaria por adquirir una vivienda resultaba muy beneficiosa y muchos ciudadanos decidieron incluso adelantar la compra, si era necesario, antes que dejar escapar esa ventaja fiscal. Este año no se dará el dinamismo de casi 500.000 operaciones en 2010. Y con un problema añadido: el mercado inmobiliario no termina de ajustarse porque las entidades financieras -fundamentalmente cajas- no sacan el stock que tienen por vender debido a que desde el Gobierno se las sigue ayudando y no se les pide un ajuste duro. Mientras eso ocurra, las cajas de ahorros no necesitarán vender, incluso a menores precios, las viviendas que tienen en propiedad. Y de esa manera, además, el mercado no terminar de ajustar precios y la burbuja sigue desinflándose de manera muy lenta.