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Francisco Granados, el broker de Valdemoro que triunfó en el PP y fue defenestrado por Aguirre

    Francisco Granados sale en coche detenido. <i>Imagen: Efe</i>


    Francisco Granados, el número dos de Esperanza Aguirre hasta 2011, ha sido detenido en el marco de la investigación policial de una operación contra la corrupción. El juez Velasco sospecha del dinero ilícito que se le ha encontrado en una cuenta de Suiza con 1,5 millones de saldo. El exdirigente popular, para muchos el delfín de Esperanza Aguirre hasta que ésta perdió la confianza, fue broker antes que político, y en la actualidad había regresado al mundo de la banca privada.

    Granados no tuvo reparos en reconocer la existencia de esta cuenta y la regularización de la misma ante Hacienda. El empresario-político admitía que tener una cuenta en el extranjero era algo bastante común en alguien que como él había trabajado en sociedades de capital extranjero.

    Natural del Valdemoro, Madrid, Granados inició su carrera profesional financiera antes que la política, que le llevó a ocupar la alcaldía de la localidad madrileña bajo las siglas del Partido Popular de 1999 a 2003.

    Granados desempeñó cargos en empresas como Société Genérale, Caja Madrid, Ibercaja, o la eléctrica francesa SNET, hasta que en 2003 es llamado por Esperanza Aguirre para ocupar el cargo de consejero en la Comunidad de Madrid.

    Del todo a la nada

    Francisco Granados también fue secretario general del Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Madrid. Ha sido consejero de la Presidencia, consejero de Interior, de Transportes, hasta que en 2011 Esperanza Aguirre decide prescindir de él. Meses más tarde también le quita la confianza para ocupar la secretaria general del PP en Madrid. En 2014, y tras el hallazgo de sus cuentas en Suiza, Granados abandona su acta de senador y diputado regional.

    Su etapa en el Ayuntamiento de Valdemoro ha sido la más turbia de su carrera política, teñida de sospechas de prevaricación y corrupción, beneficiando supuestamente a empresas a cambio de obras. No en vano, nada más llegar al consistorio madrileño, Granados abre una cuenta en Suiza, una cuenta que fue cerrada cuando Esperanza Aguirre le llamó para desempañar un cargo de consejero en la Comunidad de Madrid.

    De este periodo se recuerda la adquisición de un chalé en Marbella a un constructor de Valdemoro, quien supuestamente se lo recompró; así como el incendio del coche que conducía su esposa y que estaba a nombre de otro constructor. Además, el PSOE de Valdemoro le acusó de lucrarse en la venta de una parcela a David Marjaliza, constructor amigo y también detenido en la 'Operación Púnica'. De aquella operación se dijo que Granados recibió 1,4 millones de euros.

    En 2011, Granados declaró 510.000 euros en cuentas en 2011, y cuatro viviendas y cuatro garajes en Valdemoro. El dirigente madrileño siempre ha insistido en la corrección de sus actuaciones, subrayando que su dinero y su patrimonio están declarados a Hacienda y publicados en la web del Senado.