Crece la fractura en el seno de España por las críticas de Xabi Alonso

La eliminación de España del Mundial de Brasil está empezando a dejar sus primeras consecuencias. La primera y más inmediata surgió en la zona mixta, cuando, tras el partido Xabi Alonso de manera explícita e Iker Casillas, de forma más encubierta, señalaron a la falta de hambre y ganas de vencer de 'La Roja' para explicar esta debacle.

Otros pesos pesados respondieron inmediatamente a estos dardos con enfado. Un enfado que en las últimas horas ha ido creciendo hasta convertirse en una verdadera fractura en el seno del vestuario de la selección española entre los miembros de la 'vieja guardia' que están a punto de dejar el combinado y los jóvenes y veteranos que continuarán en el equipo en los próximos torneos internacionales.

Son los primeros, los Xavi, Xabi Alonso, Casillas o Villa los que han encabezado el mensaje más crítico, los que se han señalado a sí mismo como grupo para explicar que la carencia de ambición en los meses previos a este mundial ha generado una desgana contagiosa que ha matado la chispa que solía tener este equipo.

El hecho de que se vayan de la selección motu proprio les ha hecho sentirse liberados para decir lo que en verdad piensan de puertas hacia afuera, pero en esta ocasión de cara a una opinión pública que trataba de explicarse el miércoles semejante batacazo.

El resto, los que se quedarán, están molestos porque creen que con sus pensamientos las vacas sagradas no hacen más que atribuir a todo el grupo los que podían ser defectos sólo de unos cuantos, de aquellos que han formado parte del grueso que lo ha ganado todo.

Estos jugadores, muchos de ellos jóvenes, entienden que a ellos no se les puede reprochar nada que tenga que ver con la falta de actitud porque sus ganas de triunfar en esta selección les inhibe de semejante pecado.

Además, ellos no han participado en la debacle y, por lo tanto, tampoco han sido responsables directos (aunque no eluden su parte de culpa) de este mal campeonato del mundo para España. Ahora queda por ver qué consecuencias tendrá esta fractura en el futuro de la Selección.

La lógica dice que no debería haber mayores consecuencias toda vez que el sector veterano dejará el equipo y serán esos jovenes los que se harán con el timón del equipo.

En todo caso, es la primera vez que en los últimos seis años emerge este tipo de diferencias en el seno del grupo, más allá de hechos aislados como los roces entre jugadores del Barça y del Real Madrid.