Motor
Hito en la automoción: McMurtry logra el primer coche capaz de conducir boca abajo, desafiando así a la gravedad
- El secreto que ha hecho posible esta hazaña se encuentra en el sistema patentado por la marca para este reto.
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Nacho González
McMurtry ya fue noticia cuando con su modelo Spéirling logró batir diferentes récord de velocidad, entre ellos el récord absoluto en Goodwood, el récord absoluto en Laguna Seca, también en cuarto de milla con 7,97 segundos o diferentes récords en otros muchos circuitos incluidos el de Top Gear.
Este mismo modelo ha sido el protagonista de esta nueva hazaña, un vehículo 100% eléctrico con dos turbinas tras la cabina que aspiran aire y al expulsarlo por el escape central suena como un caza de combate además de permitirle tener una carga aerodinámica de hasta 2.000 desde parado.
Esto le permite además lograr una potencia de 1.000 CV , pesando menos de 1.000 kg para una anchura de 1.5 metros, una altura de 1.05 y una longitud de 3.2 metros. Con estad dimensiones y prestaciones se logran registros de récord, como una velocidad punta de 298 km/h o lo más espectacular, una aceleración de 0-100 km/h desde parado en tan solo 1,4 segundos.
Y lo mejor de todo es que sí, si te lo estabas preguntando, este modelo está a la venta, y las primeras entregas están previstas para 2026, eso sí, está limitado a 100 unidades y su precio se sitúa cercano al millón de euros.
Un nuevo hito de la automoción
Y sí, por si eso no era poco, desde McMurtry han logrado algo que parecía imposible: que un coche sea capaz de conducir boca abajo desafiando así a la gravedad, algo que parece sacado de ciencia ficción e imposible de replicar en el mundo real.
Pero ¿Cómo se ha gestado este hito? Bien, pues el secreto está en el sistema patentado por la marca basado en ventiladores y que incorpora este modelo que ha demostrado que aquello que soñábamos con que se hiciese realidad hace años es posible: conducir con el coche boca abajo.
Tras años de especulación sobre si coches de gran rendimiento como los Fórmula 1 eran capaces de conducir boca abajo debido a su gran carga aerodinámica y velocidades punta, ha sido McMurtry quien ha demostrado que sí, que es posible, pero con una tecnología acorde con lo necesario que en este caso se ha logrado con ventiladores.
Estos ventiladores situados bajo el coche, permiten crear un "Downforce on Demand" como lo han denominado, o carga aerodinámica al gusto, permitiendo así unir al coche con el asfalto incluso en parado ¿Algo similar a lo de los juguetes de niños capaces de conducir por paredes y techos?
Estos ventiladores ejercen tal fuerza que crean un vacío que une al coche con la superficie en que se encuentra, superando así la fuerza de la gravedad. En la demostración, tras activar este sistema, el piloto circula hacia delante y hacia atrás sin ningún tipo de amago de caída del vehículo.
Sin duda una hazaña que muestra la evolución de la automoción los últimos años y las capacidades que podrían tener los coches de aquí a unos años, si no es en carretera abierta, en posibles competiciones de Motorsport dignas de la película Tron.