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Interés alemán Latinoamérica decrece por falta dinamismo región
Stuttgart (Alemania), 19 oct (EFECOM).- El interés que despertó hace unos años América Latina entre los inversores alemanes decrece ante la falta de dinamismo de una región demasiado heterogénea, agobiada por regulaciones y fértil al populismo político.
Esa es la radiografía que hicieron hoy de la región una buena parte de los empresarios alemanes que participan en el foro sobre Mercosur organizado en Stuttgart por la Ibero-Amerika Verein, asociación que reúne a inversores alemanes con intereses en la zona.
El presidente de esta asociación, Bodo Lisenfeld, afirmó que pese al crecimiento experimentado por la economía latinoamericana en los últimos años, las inversiones alemanas están estancadas y el volumen comercial es bajo. Las exportaciones apenas llegan al 2 por ciento.
Los intereses alemanes siguen concentrándose además en dos países de la región, México y Brasil, y en el sector la maquinaria pesada y automotriz, dejando las oportunidades que brinda la región en servicios, tecnología y energía, a otros inversores más arriesgados, incluido China, cada vez más presente en sectores estratégicos
A juicio de Marienne Munhoz, jefe de la oficina brasileña de la asesoría internacional KPMG, ese estancamiento en los negocios se debe fundamentalmente a los riesgos políticos que existen en la región y a un muy complejo y heterogéneo sistema de regulaciones.
"Desde el punto de vista de los impuestos, América Latina es una pesadilla. Hay demasiadas normas y difieren en exceso de un país a otro", dijo la ejecutiva de KPMG, grupo que organizó el pasado mes en Argentina la primera conferencia del subcontinente sobre tasas.
La constatación de Munhoz fue en consonancia con la crítica de Liesenfeld a los empresarios y políticos latinoamericanos presentes en el foro de Stuttgart: "El principal riesgo de la región son sus asimetrías, sus devaneos populistas y la falta de homogeneidad".
Andreas Meister, gerente de Ergomat Industria e Comercio, empresa con implantación en Brasil, incidió en el aspecto político y criticó la política de ombligo con las que los gobiernos de turno pretenden aparentemente favorecer el producto nacional.
"La situación actual en Brasil daña nuestra empresa y al ramo de la maquinaria", señaló Meister, sin entrar en detalles.
Una de las consecuencias de esas medidas es la entrada en el mercado brasileño de plantas industriales chinas que son una mera copia de equipamientos vendidos por Alemania al país asiático.
Las "imitaciones chinas" son parcialmente construidas en Brasil y eso les da derecho al tratamiento de brasileñas, lo que significa acceso a las ayudas gubernamentales a la exportación.
"La piratería, cubierta o encubierta, es un problema añadido con el que tenemos que contar y que frena a muchos colegas", dijo.
Munhoz opinó que pese a las dificultades jurídicas y turbulencias políticas, América Latina tiene gran potencial y hay inversores, entre los que citó Telefónica, que dependen de sus ventas allí.
"El representante de Telefónica en la conferencia sobre impuestos de Argentina dijo que el 40 por ciento de los ingresos globales de la empresa proceden de América Latina, que la presencia del grupo en la zona no es una opción sino una obligación. Telefónica depende de América Latina para sobrevivir y crecer", comentó Munhoz.
Frente al escepticismo del empresariado alemán, el vicepresidente paraguayo, Luis Alberto Castiglioni, uno de los políticos de la región que se desplazaron a Stuttgart, destacó los avances que se han producido en la región, especialmente en el seno de Mercosur.
Castiglioni aseguró que Mercosur, pese a las asimetrías internas y las coyunturas económicas y políticas cambiantes y no siempre favorables que debió superar en sus 15 años de historia, es una realidad económica, comercial y política incuestionable.
Añadió que Mercosur es bueno para sus miembros y para la región, pues representa el 60 por ciento de la superficie de América Latina y el 50 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) del subcontinente.
Castiglioni se refirió a las negociaciones para la firma de un acuerdo de asociación con la UE para reiterar la buena voluntad del bloque latinoamericano a un pacto en el interés de ambos.
Destacó que el 27 por ciento de las exportaciones de Mercosur van a la UE y el 26 por ciento de las exportaciones de la UE a Mercosur.
"Es un intercambio equilibrado y complementario. La UE nos vende maquinaria y manufacturados y nosotros agropecuarios", señaló.
La discusión sobre "Mercosur precede al seminario "América Latina: Oportunidad para la mediana empresa" con el que el sector privado alemán celebrará mañana, viernes, el Día de las Américas, con la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, como invitada de honor. EFECOM
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