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Sony sufre por su reestructuración pero ya prevé beneficios para este curso



    Tokio, 30 abr (EFE).- El costoso proceso de reestructuración de la multinacional nipona Sony volvió a tener un reflejo negativo sobre sus resultados financieros de 2014, aunque la empresa prevé ya resultados positivos a raíz del mismo para el actual curso.

    SONY (JP6758.TK)registró una pérdida neta de 126.000 millones de yenes (958 millones de euros) durante el ejercicio fiscal 2014, que concluyó el 31 de marzo, apenas un 1,96 por ciento menos que lo que perdió el año anterior, cuando se dejó 128.400 millones de yenes (976 millones de euros).

    Además del costoso proceso para deshacerse de su rama de ordenadores o revitalizar su desligada unidad de televisores -que por primera vez en once años ha logrado volver a cosechar beneficios- la empresa con sede en Tokio ha cargado también este ejercicio con la losa de su deficitaria rama de telefonía móvil.

    Sin embargo, su ganancia operativa fue de 68.500 millones de yenes (520 millones de euros), un 158,7 por ciento más que en el pasado ejercicio, y sus ingresos por venta crecieron un 5,8 por ciento interanual hasta los 8,21 billones de yenes (62.434 millones de euros), datos que invitan a cierto optimismo.

    Además, la compañía confía en que el saneamiento impulsado por su presidente, Kazuo Hirai, dará sus frutos este mismo curso al sumarse a las fuertes ventas que prevé en lo referente a sensores de imagen y también a su subsidiaria de contenidos audiovisuales, Sony Pictures.

    De hecho, el director financiero de Sony, Kenichiro Yoshida, explicó hoy en Tokio que la empresa invertirá 210.000 millones de yenes (1.581 millones de euros) en la producción de estos sensores de imagen empleados en cámaras digitales, teléfonos inteligentes o tabletas.

    Por su parte, la unidad de cine, que vivió un 2014 marcado por un ciberataque que supuestamente procedía de Corea del Norte en respuesta a su película "The interview" (que ridiculiza al actual dictador del país asiático), pronostica un año cuajado de importantes ventas en su rama de contenidos y plataformas multimedia.

    De este modo, Sony, que ha cerrado en rojo seis de los últimos siete ejercicios, prevé un beneficio neto para el año fiscal 2016 -que concluye el 31 de marzo de 2017- de 140.000 millones de yenes (1.061 millones de euros).

    También una ganancia operativa de 320.000 millones de yenes (2.425 millones de euros), lo que supondría un 251 por ciento interanual más.

    Los números respaldan el plan de Hirai, pese a que Sony contempla en 2015 una caída del 3,8 por ciento en su facturación, que quedaría en 7,9 billones de yenes (59.883 millones de euros), básicamente porque, a excepción de los sensores y el cine, el resto de áreas de negocio esperan un año plano o de ligeros retrocesos.

    Hirai ha querido apostar por un plan de saneamiento y por potenciar las áreas de negocio más rentables, un planteamiento tildado de conservador por aquellos que consideran que la empresa que concibió el revolucionario Walkman debería volver a potenciar la innovación que tan buen resultado le dio en su momento.

    Por su parte, el director financiero quiso puntualizar hoy que Sony apenas ha empezado a recuperarse.

    "Ahora estamos en una fase en la que debemos restaurar la confianza perdida", añadió Yoshida.

    Independientemente del efecto que el actual plan pueda tener a medio plazo, los inversores parecen apoyar el proyecto ya que, en lo que va de año, los títulos de Sony se han revalorizado en la Bolsa de Tokio un 42 por ciento y alcanzado niveles de hace siete años.

    Andrés Sánchez Braun