Bolsa, mercados y cotizaciones
El inversor de medio plazo no compra ninguna bolsa hoy cara
El culebrón chipriota trajo a comienzos de la semana el alto en el camino que los mercados europeos necesitaban tras el festín bursátil motivado por Wall Street. Las duras condiciones del rescate de la isla del Mediterráneo fueron la excusa a la que se agarraron las bolsas para tomarse un respiro y evaluar si el rally, que había llevado al Dow Jones a máximos históricos y al S&P 500 y al Dax alemán a acariciar los suyos, podía tener continuidad.
Alan Greenspan, ex presidente de la Reserva Federal, parecía tenerlo claro al haber asegurado días antes que las subidas en EEUU "no tenían ninguna exuberancia irracional" y que la renta variable estaba todavía "barata". Pero, ¿está España barata y con gasolina para seguir tirando?
"El Ibex 35 está en un terreno neutral", dice Miguel Ángel Paz, de Unicorp. El selectivo español no está ni barato ni caro con respecto a sus datos históricos, sino que se encuentra en el ecuador de un globo en el que el norte son los mercados más caros y el sur los más baratos, al cotizar a un PER -número de veces en que el beneficio se recoge en el precio de la acción- de 12 veces. De hecho, el PER del suizo SMI es superior al situarse en las 14,7 veces y el del resto de las principales bolsas europeas se encuentra según los datos de FactSet por encima de las 11 veces.
A pesar de esta indefinición, la bolsa española continúa en tendencia alcista al aguantar los 8.250 puntos en el ataque bajista. "Si se pierde esta resistencia se podría hablar de un deterioro en las posiciones alcistas, lo que podría provocar la vuelta a los 7.900 puntos, donde se abriría una tendencia bajista", afirma Joan Cabrero, analista de Bolságora. "Si se superan los 8.500-8.530 puntos se alejaría el riesgo bajista de que se perdieran los 8.250 puntos", añade. La superación de este primer obstáculo (los 8.250 puntos) confirmó que la renta variable española sigue siendo una buena alternativa para aquellos inversores defraudados por la irrisoria rentabilidad que está ofreciendo tanto el Estado como las empresas en sus particulares emisiones de deuda (varios ejemplos: el Tesoro ha colocado esta semana bonos a 10 años todavía por debajo del 5% y recientemente BBVA pagó un 3,25 por ciento por deuda senior a tres años) y para los que empiezan a especular, a raíz de lo de Chipre, con que sus depósitos dejen de tener en algún momento la seguridad de la que hasta ahora venían gozando.
El hecho de que el Ibex cotice ahora un 10,4% más caro por PER que en la última década tiene sus explicaciones. Y es que hay que tener en cuenta que en este cálculo intervienen factores, como la proyección de los resultados futuros de las compañías, que pueden sufrir alteraciones en el caso español por el lado de las estimaciones de beneficios de la banca. Y es que las ganancias de la banca no están normalizadas por las importantes provisiones realizadas para cubrirse del riesgo del ladrillo. Aún así los expertos siguen optimistas con la bolsa española: el consenso de mercado, recogido por FactSet, estima un potencial alcista en el Ibex del 6,7%, hasta los 8.890,53 puntos, pese a llevar una subida del 40% desde los mínimos del mes de julio. En este contexto el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, considera que las perspectivas para la economía española comienzan a ser más positivas y que los buenos resultados se verán en la segunda mitad del año y de forma más clara en 2014. Botín prevé para su banco un "fuerte aumento" en los resultados de 2013, tras haber completado el saneamiento de su balance inmobiliario.
Daniel Pingarrón, estratega de IG, asegura que "las bolsas cotizan ahora en niveles mucho más sanos" al estar las compañías menos apalancadas, y recuerda que el PER actual de nuestra bolsa es mucho más bajo que en 2007 [cuando se situó en las 12,6 veces de media], cuando las bolsas americanas alcanzaron sus anteriores máximos, porque los beneficios son ahora más elevados gracias a la internacionalización de los negocios.
La desaceleración de la econonomía de la eurozona y el potencial de crecimiento en otros países ha obligado a muchas compañías españolas a probar suerte en otros puntos del globo. Precisamente, esta aventura por el mundo latinoaméricano y asiático hace posible que las casas de análisis contemplen para este año un beneficio neto de 34.232 millones de euros para el conjunto de las empresas del Ibex, un 117 por ciento superior a lo que ganaron en 2012.
No obstante, el PER del Ibex se encuentra lejos del mínimo de 6,8 veces que llegó a pagar el inversor en 2008, pero también del PER máximo del selectivo (superior a los 22 veces) marcado a finales de los noventa.
En dónde deshacer las maletas
OHL y Ferrovial son indudablemente las compañías favoritas de los expertos a día de hoy, al ser las únicas del Ibex que lucen una recomendación de comprar. Sin embargo, por precio sólo la primera se cuela en el listado de quince valores que se han abaratado por PER en la última década. Inditex, OHL, Red Eléctrica, Viscofan, Enagás, Telefónica, ACS y Mapfre son los valores que más han reducido su PER en este periodo, concretamente entre un 83 por ciento de la textil y un 50% de la aseguradora.
En esta ocasión, Inditex no lo tenía complicado. El inversor que comprara acciones de Inditex en 2003, dos años después de que la textil saliera a bolsa para reforzar su expansión internacional, necesitaba 137 años para recuperar su inversión a través de los beneficios que entonces generaba. Y ahora, con los tentáculos del grupo de Zara por los cinco continentes, su PER es de 23,8 veces, un ratio mucho más reducido pero que los expertos siempre mencionan como uno de los impedimentos para seguir apostando por el valor. Y es que su cotización se ha revalorizado más de un 372 por ciento desde 2003 y los beneficios han aumentado un 498%.
OHL y Red Eléctrica se han abaratado un 81 y un 78%, respectivamente, desde 2003, año en que ambas cotizaban a un PER de unas 49 veces. Un abultado múltiplo de beneficios que en este ejercicio sólo se espera que en el Ibex lo supere Popular al cotizar a 59 veces. Por su parte, Viscofan ha logrado reducir en casi cuatro veces su PER desde 2003, al descender desde las 67 a las actuales 17,3 veces, y el PER de Enagás ha pasado de las 31,3 a las 11 veces.
El inversor que quiera tomar posiciones en Telefónica, ACS, Mapfre, debe saber que lo hace entre un 55 y un 50% más barato por PER que en la última década y que entraría a formar parte del accionariado de una de las seis compañías del Ibex -junto con Sacyr, OHL y BBVA- en las que previsiblemente el retorno de la inversión vía beneficios será en 2013 de un solo dígito.
El resto de las compañías que presentan en 2013 un PER inferior al de 2003 y en las que en principio debería resultar más atractiva la inversión son: Abengoa, Endesa, Abertis, Indra, Iberdrola, Gas Natural y BBVA. En este sentido, la gran banca española (BBVA y Santander) cotiza a un PER medio de 9,8 veces, un 3% más barato que en la última década, cuando el país vivía todavía el apogeo de la burbuja inmobiliaria, pero un 95% más caro que en 2008. En este año, y a diferencia del quinquenio anterior, empezaba a salir a la luz la mala praxis del sistema financiero mundial, que sentando las bases para la que hoy es "la mayor crisis económica desde la II Guerra Mundial".
El Nasdaq, al estilo de los BRIC
Y si en 2003 España alimentaba la burbuja inmobiliaria, EEUU recogía los rescoldos del famoso pinchazo de las puntocom. Época en la que, como dice el escritor Burton G. Markiel "la promesa de Internet provocó la mayor creación y destrucción de riqueza de todos los tiempos. Cuando la burbuja estalló se evaporaron más de ocho billones de dólares. Fue como si la producción anual de las economías de Alemania, Francia, Inglaterra, Italia, España, Holanda y Rusia hubieran desaparecido por completo".
El Nasdaq aumentó más de tres veces desde finales de 1998 hasta marzo de 2000. Y ahora, más de diez años después del estallido de las empresas de Internet, el Nasdaq da síntomas de excelentes oportunidades. El índice por excelencia de la tecnología es el que más se abarata de media por PER en los últimos diez años entre los grandes mercados mundiales y el único que se une a Rusia, India, China y Japón para hacerlo también en el último quinquenio. "Cuando es difícil ver al Ibex alcanzar un PER estimado de 14 veces, es muy habitual en el Nasdaq 100 llegando a veces a niveles de 18 veces. Así que podemos considerar que ahora está barato", explica Miguel Ángel Paz.
Como manda la tradición, o como históricamente se ha demostrado, el PER de los indicadores estadounidenses siempre ha sido más alto que el de los europeos. Y este año no es una excepción, con la salvedad del suizo SMI, que en esta ocasión se perfila como el mercado más caro por este criterio. El Nasaq 100 cotiza en estos momentos a un PER de 14,3 veces, lo que supone un abaratamiento de cerca del 25% en los últimos diez años y del 1,8% si tomamos como referencia 2008 -entonces cotizaba a 14,56 veces-. Evidentemente, todas las compañías del Nasdaq 100 se han abaratado frente a los múltiplos desorbitados que presentaban en 2003. Apple, Priceline, Celgene y Google son las cuatro tecnológicas que más han reducido su PER en este período al hacerlo en más de un 99%. Tras el espectacular rally de sus acciones por la innovación de sus productos y siguiente corrección, el gigante tecnológico cotiza ahora a un PER de 10,4 veces, frente a las desorbitadas más de 4.500 veces que lo hacía en 2003.
Otro ejemplo son Priceline y Celgene, que cotizan a un PER de 17,6 y 19,7 veces respectivamente, frente a las más de 2.500 veces de hace diez años. En el caso de Google, del buscador más famoso del mundo, el inversor que quiera el retorno de su inversión vía beneficios tendrá ahora que esperar 17,7 años, frente al PER de casi 2.000 veces que llegaron a pagar hace ahora diez años.