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Las peores perspectivas empujan a Rajoy a revisar la política económica
Rajoy, que dijo el miércoles que no relajaría los esfuerzos para sacar al país de la crisis económica, había diseñado un plan a cuatro años para mejorar las finanzas del país, reducir la elevada tasa de paro y volver a ganar las elecciones.
Así, 2012 era el año de las reformas estructurales más dolorosas, 2013 el ejercicio de la estabilización económica, y en 2014 el Gobierno reduciría algunos impuestos e introduciría medidas de apoyo a las empresas, dejando para 2015 una mejoría económica que le ayudara a recuperar credibilidad y ganar de nuevo los comicios. Pero este plan parece ahora desfasado.
La Comisión prevé que España tenga un déficit del 6,7 por ciento del PIB en 2013 en lugar del 4,5 por ciento comprometido por España con Bruselas y, salvo que cambien las políticas económicas, el déficit será en 2014 del 7,2 por ciento frente a un objetivo del 2,8 por ciento.
El ejecutivo de la UE está dispuesto a conceder más tiempo a España para relajar su déficit por debajo del límite del 3 por ciento, aunque fuentes europeas indicaron que solo se dará a cambio de más reformas estructurales y nuevos recortes presupuestarios.
España ya recibió un año más, hasta 2014, para cumplir el objetivo de situar el déficit por debajo del 3 por ciento del PIB. Es probable que el calendario se vuelva a relajar de implementarse reformas, según las fuentes.
"Está claro que las previsiones no pintan bien. En mayo, cuando tengamos cifras más sólidas sobre 2013 y siempre que el Gobierno introduzca las medidas que hemos recomendado, ofreceremos más margen", dijo una fuente de la eurozona. "La hoja de ruta es clara. Las recomendaciones son públicas desde hace meses".
RECOMENDACIONES
En mayo del año pasado, la Comisión presentó ocho recomendaciones que el Gobierno debe haber introducido para finales de 2013, entre ellas la reforma de las pensiones públicas, un cambio del sistema fiscal, nuevas medidas para impulsar la creación de empleo y un mejor control de las finanzas de las regiones.
Algunas de estas medidas, por ejemplo el aumento del IVA, ya se han introducido. Otras, como la estricta supervisión de las finanzas de las 17 Comunidades Autónomas, se han adoptado pero la Comisión cree que el Gobierno central debería hacer un uso más intensivo de las nuevas provisiones.
Un tercer grupo aún debe de ser aprobado, como la reforma del sistema público de pensiones para acabar con el retiro anticipado y acelerar el incremento previsto en la edad de jubilación.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría dijo el viernes que el Gobierno trabaja ya para acelerar un acuerdo con el resto de formaciones políticas en el Pacto de Toledo con el fin de modificar el sistema.
Pero, preguntada sobre si el Gobierno estaba trabajando en nuevos paquetes de recortes presupuestarios para tratar de alcanzar los compromisos de consolidación fiscal, la mano derecha de Rajoy hizo hincapié en que el presidente del Gobierno estaba tratando de aplicar ahora más recetas de estímulo para facilitar la vuelta al crecimiento y menos de austeridad.
"Son necesarias políticas de crecimiento para que en este país se vuelva a contratar. Eso no quiere decir que no se siga adelante con otras reformas como la autoridad fiscal independiente o las pensiones", dijo Sáenz de Santamaría. "No, el Gobierno no está pensando en ese tipo de (nuevos recortes) de medidas".
En todo caso, algunos economistas consideran que pese al creciente malestar social es solo cuestión de tiempo que Rajoy se vea forzado a adoptar nuevas medidas de austeridad, incluyendo hacer permanentes las subidas de impuestos anunciadas como temporales en 2011 pocos días después de asumir el poder.
"Hacer permanentes las subidas de impuestos (...), eso para empezar. Tal vez hay una discusión en el Gobierno, pero para los economistas, no hay discusión", explicó José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney.
"Tendrán que ir mucho más allá: Sociedades, se puede tocar, por ejemplo; el déficit tarifario también lo tienen que arreglar y no veo cómo pueden hacerlo sin tomar más medidas de gasto en Seguridad Social y me refiero a pensiones y prestaciones de desempleo" añadió.
Díez reconoció que las nuevas medidas de estímulo para ayudar a las pequeñas y medianas empresas y a los jóvenes desempleados van en la buena dirección, pero añadió que su efecto es limitado a la hora de reactivar la economía o crear los cientos de miles de puestos de trabajo que requiere el país.
"Rajoy tiene que aceptar la realidad. ¿Cómo puedes decir por una parte que no habrá más escuerzos y, por otra, estar preparando más recortes?", dijo.
/Por Julien Toyer/