Wall Street abre sin una tendencia clara y el Dow Jones sube un leve 0,1 por ciento

Media hora después del inicio de la sesión, ese índice sumaba 14,48 puntos y se colocaba en las 13.985,72 unidades, en tanto que el selectivo S&P 500 subía un marginal 0,03 % (0,49 puntos) hasta 1.517,5 unidades y el índice compuesto del mercado Nasdaq bajaba otro ínfimo 0,07 % (-2,16 puntos) hasta las 3.189,84 unidades.

La indecisión se hacía con el parqué neoyorquino en una jornada en la que Obama pronunciará el primer discurso sobre el estado de la Unión de su segundo mandato, que se espera esté centrado en la recuperación económica, por lo que Wall Street seguirá con atención sus palabras.

Si bien esta jornada tampoco se conocerán datos macroeconómicos de relevancia en Estados Unidos, la temporada de resultados sí que se reactivó de la mano del fabricante de bebidas Coca-Cola, que lideraba el terreno negativo del Dow Jones con un descenso del 1,84 %.

La empresa anunció que obtuvo un beneficio neto de 9.019 millones de dólares en su ejercicio fiscal 2012, el 5 % más, mientras que tan solo en el último trimestre elevó sus ganancias en un 13 %, aunque esos resultados no convencieron a los inversores neoyorquinos.

Otras seis empresas de ese índice registraban descensos, mientras que el lado positivo lo encabezaban Bank of America (1,77 %), la emisora de tarjetas de crédito American Express (0,74 %), el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar y la aseguradora Travelers (0,73 % en ambos casos).

Fuera de ese índice destacaba la contundente subida del 10,18 % que registraba la firma de ropa y complementos Michael Kors, que anunció antes de la apertura que sus ingresos trimestrales se dispararon el 70 % y elevó sus pronósticos de ganancias para el actual ejercicio.

Por otro lado, el gigante tecnológico Apple cedía el 0,61 % a la espera de que su consejero delegado, Tim Cook, participe en la conferencia sobre tecnología e internet que celebra en San Francisco el banco de inversión Goldman Sachs.

En otros mercados, el petróleo de Texas subía hasta 97,5 dólares por barril, el oro descendía a 1.648 dólares la onza, el dólar perdía terreno frente al euro, que se cambiaba a 1,3435 dólares, y la rentabilidad de la deuda estadounidense a diez años avanzaba al 1,98 %.