Bolsa, mercados y cotizaciones
El IBEX marca un nuevo mínimo anual y la prima de riesgo alcanza los 510 puntos
A las 10,50 horas el selectivo español se situaba en 6.297 unidades, mínimo anual y su nivel más bajo desde mayo de 2003, tras perder más del 1,5 %.
De nuevo era Bankia, que perdía el 5,74 %, el valor que arrastraba a los bancos cotizados y a los grandes valores del mercado.
Según el equipo de estrategia de Self Bank, la entidad seguirá en el punto de mira a la espera de que se concreten los detalles de su reestructuración.
Bankia reconoció el pasado viernes que había perdido el año pasado 2.979 millones de euros después de rehacer sus cuentas, y ayer fue el consejo de administración de su matriz Banco Financiero y de Ahorros (BFA) el que reconocía que el año pasado había perdido 3.318 millones de euros, después de anunciar a finales de abril un beneficio de 40,91 millones.
Repsol cedía el 2,93 %, Santander, el 2,56 %, el Popular, el 2,22 %, Sabadell, el 2,36 %, BBVA, el 2,02 %, y Caixabank, el 1,29 %.
Endesa se dejaba el 1,62 %, Bankinter, el 0,57 %, Iberdrola, el 1,13, Telefónica, el 1,05 %, e Inditex, que consolidaba un poco mas su posición como empresa con mayor capitalización del índice, el 0,38 %.
Estas caídas alejaban al IBEX del resto de mercados europeos, que mantenían avances del 0,61 % en Fráncfort, del 0,23 % en Londres, del 0,30 % en París.
Únicamente el MIB de Milán retrocedía el 0,06 %, poco antes de que el Tesoro italiano saque a subasta 8.500 millones de euros en bonos a seis meses.
Por lo que respecta al mercado de deuda soberana, la prima de riesgo de España, que mide el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán del mismo riesgo permanecía en niveles históricamente altos (510 puntos básicos) con la rentabilidad del bono hispano en el 6,459 %.
España se ha convertido en el foco de atención del mercado después de que el temor a que Grecia abandone la zona del euro haya remitido, en parte por la inyección de liquidez que han recibido los cuatro mayores bancos helenos y en parte por las encuestas que favorecen a los partidos más moderados y partidarios del euro en las elecciones de junio.