Bolsa, mercados y cotizaciones
La prima de riesgo española vuelve a bajar de 200 puntos
La posición de España en los mercados financieros retrocedió ayer tres semanas. Y en esta ocasión el viaje en el tiempo fue para bien, puesto que significó que la prima de riesgo, medida por la diferencia entre la rentabilidad de los bonos españoles y alemanes a 10 años, se situó bajó el umbral de los 200 puntos básicos - algo que no ocurría desde el 14 de abril.
Se relajó, en concreto, hasta los 198,1 puntos básicos, y acumula un descenso de 27 puntos básicos en el conjunto de las cinco últimas jornadas. En este mismo intervalo, el retorno de las compras ha permitido que el rendimiento de los bonos españoles a 10 años se ha moderado del 5,50 al 5,26% -la rentabilidad baja cuando el precio de los títulos sube-.
Este retroceso se ha producido en un entorno menos hostil con respecto a la posición de Grecia, una realidad que se ha plasmado en que su prima de riesgo se ha moderado de los 1.289 a los 1.199 puntos básicos en las cinco últimas últimas jornadas. La posibilidad de que el país heleno se vea obligado a reestructurar su deuda, sugerida por el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schauble, a mediados de abril, había vuelto a calentar la crisis de la deuda periférica.
Sin embargo, las autoridades europeas han cerrado filas en los últimos días en torno a Atenas. El lunes, el comisario europeo, Olli Rehn, y el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Victor Constâncio, se mostraron convencidos de que Grecia pagará su deuda. Las dudas del mercado, sin embargo, van más allá. "El problema de Grecia no es tanto una cuestión de liquidez, puesto que los vencimientos de deuda previstos para los tres próximos ejercicios estarían cubiertos con el importe del rescate al que se ha acogido, como de capacidad de pago, de solvencia a medio plazo", explican desde Banif.
Emisiones española y lusa
La relajación de la prima de riesgo allanará el camino al Tesoro Público español, que volverá mañana a la actividad emisora con una subasta de bonos a cinco años, operación con la que se ha propuesto captar entre 3.000 y 4.000 millones de euros. La última vez que el organismo adjudicó títulos a un lustro fue el 3 de marzo. En ese momento salieron al mercado con un interés medio del 4,389%. En la actualidad, el rendimiento de los bonos a cinco años en el mercado secundario -en el que cotizan tras haber sido emitidos- se encuentra en el 4,53%, con lo que el coste podría ser superior al de hace dos meses.
Antes de la emisión española, el mercado tiene hoy una cita con Portugal. El Instituto de Gestión de la Tesorería y del Crédito Público se ha propuesto como meta captar entre 750 y 1.000 millones de euros en letras a tres meses. La prima de riesgo lusa también se ha moderado en las últimas jornadas, aunque con menos intensidad: ha pasado de los 640 a los 629 puntos básicos en los dos últimos días.