Las partes impugnan el fallo contra la petrolera Chevron en Ecuador



    La petrolera estadounidense Chevron presentó el jueves un recurso contra un fallo en Ecuador que la condenó a pagar 9.500 millones de dólares por daños ambientales, el cual a su vez fue apelado por los demandantes que consideran insuficiente ese monto.

    "Presentamos una petición pidiendo aclaración y ampliación de varios puntos en la Corte Provincial de Sucumbíos (noreste) ante el juez Nicolás Zambrano", dijo a la AFP en Quito el portavoz de Chevron para América Latina, James Craig.

    Este jueves vencía el plazo para que las partes apelaran el fallo emitido el pasado lunes por daños atribuidos a la también estadounidense Texaco -adquirida por Chevron en 2001- durante su operación en Ecuador entre 1964 y 1990.

    Zambrano "debería responder a esa petición y al momento que lo haga nosotros tendríamos 72 horas para presentar una apelación", explicó Craig.

    Según el portavoz, el escrito entregado al juez "tiene el mismo efecto que una apelación en términos de suspender cualquier ejecución" de la sentencia, que la firma considera "ilegítima e inaplicable" y fruto de un complot entre abogados y "jueces corruptos".

    La apelación de las comunidades amazónicas que demandaron a Chevron en 1993 fue presentada horas más tarde por su abogado, Pablo Fajardo, quien pidió al juez considerar "categorías de daños" que asegura no valoró en su decisión y elevarían el monto de la condena.

    Fajardo explicó que el escrito no plantea una cantidad específica, pues el juez fija los valores.

    Los daños que los demandantes solicitan tomar en cuenta se refieren al crudo que Texaco habría esparcido en carreteras de las provincias de Sucumbíos y Orellana, y las pérdidas económicas sufridas por campesinos.

    "El juez reconoce que la contaminación agrava la pobreza en la zona; es justo, razonable, que disponga una cifra económica a fin de reparar ese daño", comentó el abogado a la AFP.

    Asimismo, piden al juez que "disponga de una cifra para recompra de tierras de los pueblos indígenas", que "debieron abandonar sus territorios invadidos para alejarse de la contaminación", indicó el jurista.

    La condena es por 8.640 millones de dólares, más una multa de 10% establecida en una ley de gestión ambiental, por lo que Chevron tendría que desembolsar unos 9.500 millones de dólares, la sentencia más alta en un juicio ambiental contra una petrolera.

    Los demandantes -unos 30.000- acusan a Texaco de verter tóxicos que dañaron el agua, el suelo y la salud de indígenas que incluso murieron de cáncer.

    Chevron niega los cargos y asegura haber cumplido con la limpieza de vertederos de desechos como parte de un acuerdo con Ecuador, a diferencia, según dice, de la estatal Petroecuador, que debía hacer lo propio como parte de un consorcio con Texaco vigente entre 1972 y 1992.

    La firma pidió al juez aclarar, entre otras cosas, por qué basó su fallo en "resultados de un laboratorio que no está acreditado en Ecuador", e "ignoró 20 años de operaciones de Petroecuador que tiene un récord ambiental ampliamente conocido como pobre", dijo Craig.

    Asimismo, pide al juez aclarar por qué omitió "declaraciones de testigos de Chevron y de terceras personas que han hablado positivamente sobre las operaciones de Texaco", y demostrar que la ley ecuatoriana contempla "daños punitivos" como aquellos por los que se la condenó.

    Craig anticipó que, ante un fallo adverso de la apelación, Chevron acudirá a la Corte Nacional de Justicia (suprema), y afirmó que la empresa goza de "cierta protección" por una medida de la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya, emitida el 9 de febrero en una demanda contra el Estado ecuatoriano.