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El Gobierno argentino apelará el fallo contra el uso de las reservas para pagar deudas
"Vamos a apelar el fallo", dijo el ministro del Interior, Florencio Randazzo, en referencia al dictamen firmado por la magistrada de lo contencioso administrativo María José Sarmiento.
El fallo de Sarmiento sostiene que debe ser el Parlamento el que decida el uso de los fondos del Banco Central, tal como aducen las principales fuerzas de la oposición, según fuentes judiciales y dirigentes opositores.
Por tanto, quedó suspendido el decreto que la presidenta argentina, Cristina Fernández, firmó a mediados de diciembre para crear un fondo con reservas monetarias por 6.569 millones de dólares para pagar deudas soberanas este año.
El ministro del Interior remarcó a la emisora bonaerense Radio 10 que la jefa del Estado había firmado tal decreto en vista de que el Parlamento está en receso desde noviembre y para dar certeza a los acreedores de la deuda argentina "para todo 2010".
Randazzo destacó además que el Banco Central tiene un "nivel de reservas muy importante" para garantizar el pago de deudas.
El presidente del instituto emisora, Martín Redrado, se opuso a este empleo de las reservas, por lo que fue destituido por un decreto que la presidenta y sus ministros firmaron el jueves y entró en vigor hoy.
Los abogados de Redrado presentaron hoy un recurso contra su destitución después de que el funcionario ratificara su negativa a cumplir las ordenes del Gobierno y por considerar que su destitución solo puede ser decidida por el Parlamento por más que haya sido designado a propuesta del Ejecutivo.
El Legislativo estará en receso hasta el 1 de marzo, a menos que el Ejecutivo llame a sesiones extraordinarias, cosa que no ha hecho, por lo que la oposición busca la forma de convocar una sesión para semana próxima.
La comisión legislativa encargada de controlar la validez de los decretos presidenciales está dividida entre ocho oficialistas y otros tantos opositores, por lo que las disposiciones de Fernández están vigentes hasta que el Parlamento dirima el asunto, según el Gobierno.