Se vende ‘papel’ alemán y francés, para hacerse con bonos de Italia, España y PortugalLas compras en el mercado de renta variable también llegaron a la deuda. Pero no a toda, solo a la periférica. Con la resaca aún del resultado del referéndum constitucional de Italia, la expectativa de que el Banco Central Europeo anuncie mañana una prolongación de su programa de compra de deuda (el famoso QE) más allá de marzo de 2017 llevó a los inversores a adquirir bonos de España, Italia y Portugal -con la excepción de Grecia-. Salvo sorpresa mayúscula, el mercado descuenta que habrá QE para largo e incluso no descarta estímulos adicionales (un 89 por ciento de los expertos encuestados por Bloomberg espera que los anuncie mañana, en la que será la última reunión del año). Es precisamente esa expectativa de que la institución que capitanea Mario Draghi retire aún más deuda pública -y corporativa- del mercado durante más tiempo la que explica que ayer, por ejemplo, los inversores prefiriesen deshacer posiciones en la deuda del núcleo de Europa (como la alemana y francesa), con menos recorrido, y comprar periférica. El español, baja del 1,5% Esas adquisiciones fueron las encargadas de relajar la rentabilidad del bono español a 10 años, que baja cuando su precio sube, al revés que en la bolsa, por debajo incluso del 1,5 por ciento, hasta el 1,49 por ciento (6 puntos básicos menos que un día atrás). O que la italiana, también, cerrase por debajo del 2 por ciento, al caer otros 4 puntos, hasta cerrar en el 1,93 por ciento. “Italia es la tercera mayor economía de la Unión Europea y el mercado de deuda pública más grande de la zona euro, de modo que el Banco Central Europeo es muy consciente de su vulnerabilidad”, explican desde Robeco. “Esto podría suponer un incentivo más para que la institución amplíe su programa de compras más allá de marzo de 2017”, continúan desde esta firma, “para controlar posibles incrementos excesivos de los intereses de la renta fija italiana”. En la actualidad el coste medio de su deuda se sitúa en el entorno del 3,1 por ciento. El papel luso también encontró hueco en las carteras. Ayer su interés se redujo otros 6,8 puntos básicos, del 3,7 por ciento hasta cerrar en el 3,63 por ciento. Ventas en el núcleo Más allá de estas tres referencias, en el resto del mercado de deuda pública se registraron ventas, en un día en el que las bolsas de media Europa lograron batir resistencias (ver página 19). El interés del bono alemán a 10 años, que llegó a cotizar en terreno negativo este ejercicio, repuntó del 0,33 al 0,37 por ciento; y también el de Francia, que subió del 0,79 al 0,8 por ciento.