Los inversores temen ver ventas masivas tanto en la renta fija como en la variableCon los inversores aún intentando digerir la multitud de declaraciones de los distintos funcionarios de la Reserva Federal, que hasta el próximo 21 de septiembre estarán obligados a guardar voto de silencio, algunos gurús financieros aprovecharon ayer la tensa calma para advertir sobre los riesgos que se ciernen sobre la renta fija. “Es arriesgado subir tipos por encima de lo que descuenta la curva (del bono)”, avisaba Ray Dalio, fundador de Bridgewater Associates, el fondo de cobertura más grande del mundo durante su intervención en la conferencia Delivering Alpha. En este sentido, el multimillonario gestor consideró que la Fed está poniendo “demasiada atención en el ciclo de negocio y no tanta en el de la deuda” ignorando en cierta forma “la reacción del mercado”. “Es una situación peligrosa”, aseguró haciendo referencia a los 11 billones de dólares en deuda soberana con una rentabilidad negativa. Según su punto de vista, la Fed no debería subir tipos, contradiciendo las declaraciones de otras figuras de la industria financiera, como Jamie Dimon, el consejero delegado de JPMorgan, que urgen al banco central estadounidense a mover ficha. Sin embargo, para el fundador de Bridgewater Associates, los precios de los bonos ya reflejan el hecho de que la Fed subirá tipos. Por su parte, Paul Singer, presidente de Elliot Management, tampoco se mostró optimista al considerar que “es un momento muy peligroso para los mercados globales”, donde, sin medidas que estimulen el crecimiento, “las políticas monetarias son la única alternativa”. Singer dijo que los inversores “deben tener mucho cuidado” ante las presiones inflacionarias. “Llegará el momento en que la inflación, pese al tímido crecimiento, pueda dispararse por encima de los objetivos y sorprender a todos”, señaló al recomendar deshacer posiciones en bonos a largo plazo. Temor a ventas masivas Desde Goldman Sachs consideraban esta semana que la rentabilidad de los bonos del Tesoro a 10 años ha caído demasiado a medida que las medidas cuantitativas a nivel global pierden fuelle. Desde Citigroup, su estratega Jabaz Mathai, afirmó en un informe que “la venta es un ajuste del riesgo, no refleja una mejora en los datos económicos”. “No esperamos una oleada de ventas sostenida como la de otoño de 2013 o la de primavera de 2015”, añadió. Las preocupaciones por el sobrecalentamiento de las acciones y los bonos está generando cierta tensión entre los inversores que temen ver una venta masiva en ambos activos, lo que frustraría la dinámica de que los precios de los bonos suben cuando las acciones de renta variable caen. En los últimos días, las ventas se han producido en ambos activos. Ayer la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años volvía a elevarse por encima del 1,7 por ciento, desde el 1,66 por ciento.