Tras una serie de indicadores económicos que invitaban a pensar en el final del miedo en Europa, la publicación de los PMI sirvió para reavivar el temor a que la debilidad dure más de lo que muchos piensan. Lógicamente son quienes son y por eso mismo Alemania y Francia se bastaron solas para la decepción de la zona euro. Pero Europa no es el único temor de los inversores, el índice manufacturero de China elaborado por HSBC ha caído hasta la frontera que marca la contracción de una economía.