Se pueden contar con los dedos de una mano las veces que lo ha hecho en 2013. Y ayer fue una de ellas. La confianza en la deuda pública española hizo posible que la rentabilidad del bono español a 10 años cayera por debajo del 4 por ciento durante la sesión. Un hito que hay que remontarse al 1 de noviembre para verlo también al cierre del mercado y si no a octubre de 2010. Al final, la prima de riesgo cerró en los 222 puntos básicos al despedir la jornada el bono español en el 4,034 por ciento y el bund, en el 1,81 por ciento.