La plata también se suma a las caídas y se sitúa en niveles de 2010Una jornada más los metales preciosos perdieron brillo en el parqué, ya que tanto el oro como la plata volvieron a ser protagonistas por las pérdidas que registraron. En este sentido, el oro llegó a situarse a lo largo de la sesión en los 1.336,30 dólares, mínimos desde febrero de 2011, aunque logró remontar hasta la zona de los 1.380 dólares, por lo que consiguió romper las siete jornadas consecutivas a la baja que venía arrastrando. Pero en lo referente a su recorrido en 2013, el metal precioso no levanta cabeza y ya retrocede más de un 17 por ciento. Esta sangría que está sufriendo el activo refugio por excelencia viene motivada por dos razones. Por un lado, la fuerte revalorización que ha experimentado en los últimos trece años en los que ha subido más de un 400 por ciento, hasta alcanzar los 1.888,7 dólares y, por otro, el buen momento que están firmando otro tipo de activos como la renta variable, que provoca que los inversores deshagan posiciones para dirigir su inversión a otras opciones más rentables. No obstante, en esta senda bajista el oro no viaja solo, ya que la plata también se está viendo muy afectada por las caídas. De hecho, ayer se sumó a los descensos a lo largo de la sesión y marcó niveles de septiembre de 2010 al caer un 1,33 por ciento, hasta los 21,01 dólares. Un dato que si se traslada a lo que va de ejercicio se traduce en un retroceso superior al 24 por ciento. Sin embargo, al igual que el oro, se apuntó a la remontada y pudo alcanzar la zona de los 22 dólares.