madrid. El próximo miércoles 2 de enero la bolsa española estrenará un nuevo ejercicio y tendrá una agenda muy apretada. No sólo llegará una lluvia millonaria de dividendos -los accionistas de Endesa, Unión Fenosa, Red Eléctrica e Iberdrola pagarán más de 1.000 millones de euros en conjunto-, sino que los nuevos pesos pesados del parqué español jurarán su cargo como componentes del Ibex 35. Grifols y Abengoa se incorporan al indicador más importante de la bolsa en sustitución de Antena 3 y NH Hoteles, una decisión que tomó el comité de sabios que deciden qué valores se merecen ser llamados grandes el pasado 12 de diciembre. Todo apunta a que a lo largo de este año van a tener que volver a replanteárselo. En el Ibex 35 quedan tres compañías tocadas por los movimientos corporativos. Tanto sobre Agbar (Aguas de Barcelona), como sobre Altadis y Sogecable pesa una oferta de adquisición sobre la totalidad del capital que pueden acabar echándolas del índice. A otros valores, como a Inmobiliaria Colonial, le pueden costar el puesto su propia evolución bursátil. Después de perder alrededor de un 60 por ciento el año pasado, esa caída puede dejarla fuera en el nuevo ejercicio. Si lo dejara, sería una de las pocas veces que el indicador se queda sin un representante del sector inmobiliario -Sacyr está expuesto al negocio pero se engloba en el grupo de constructoras-. ¿Y quiénes tienen cartas para entrar en el indicador? Pues los últimos en llegar a la oficina bursátil, como son Iberdrola Renovables y Criteria. Las dos operaciones de salida a bolsa más importantes de 2007 probablemente juren su cargo en 2008.