En algunas situaciones, un buen chaleco salvavidas puede salvar a cualquiera de dejarse arrastrar por la corriente. En este caso, las aguas no estaban precisamente en calma - el parqué español acabó en números rojos-, y entre las compañías que se subieron al bote salvavidas de las compras, no estaba Prisa, a pesar de cubrirse las espaldas con la presentación de resultados.Pese a haber superado las previsiones de los analistas, y haber logrado un beneficio neto en los nueve primeros meses del año de 146,07 millones de euros -un 47 por ciento más que el mismo periodo del año anterior- las acciones de Prisa se dejaron un 3,48 por ciento, hasta los 13,33 euros. Aunque los inversores le permitieron vivir su momento de gloria, cuando acusó una fuerte subida en cuestión de minutos durante la sesión. Tal vez las palabras de Jaume Roures, presidente de Mediapro, pronosticando que el partido Mediapro-Audiovisual Sport (de la que Sogecable tiene un 80 por ciento) podría durar años, terminaron por hacer caer sus títulos. El mercado asistió también a la presentación de las cuentas de Corporación Financiera Alba. El brazo inversor de la familia March obtuvo un beneficio neto de 416,9 millones de euros, un 41 por ciento menos que el mismo periodo del año anterior, según la compañía por "menores desinversiones", y es que en 2006 las plusvalías por la venta de su participación en Carrefour engordaron notablemente sus cuentas. Los títulos de Alba tampoco consiguieron salvarse del aguacero bursátil y terminó la sesión retrocediendo un 0,77 por ciento.Y entre tanto valor descarriado, el Pastor consiguió salvarse. El beneficio neto de la entidad creció un 25 por ciento respecto al mismo periodo de 2006, y salvó la sesión anotándose un 0,09 por ciento.