El presidente francés copia la misiva al resto de países del G-7berlín. El presidente francés, Nicolas Sarkozy, no pierde oportunidad para saltar a los titulares, ya sea jaleando a ciclistas en el Tour o ayudando a liberar prisioneros. En esta ocasión la crisis hipotecaria que se vive en EEUU y las turbulencias en los mercados financieros le sirven para llamar una vez más la atención sobre su estrenado liderazgo. En una carta dirigida a la canciller alemana Angela Merkel, presidenta de turno del G-7, Sarkozy ha pedido que las autoridades ejerzan una importante vigilancia, ante las últimas correcciones de los mercados financieros. Aunque no espera que la actual volatilidad del mercado afecte a la economía real, Sarkozy cree que "las correcciones que estamos viendo están llevando a las autoridades de nuestros países a ser muy vigilantes ante el desarrollo de la situación". Por eso, en la misiva fechada el 15 de agosto y con copia al resto de miembros del G-7, el presidente francés pide que los siete países más ricos del mundo estudien el asunto, junto a los bancos centrales y el Fondo Monetario Internacional, en la reunión que mantendrán en Washington los ministros de finanzas el próximo octubre. Sarkozy ha destacado la importancia de contar con un mercado financiero transparente, pero también ha dejado claro que en la búsqueda de soluciones deben evitarse medidas que pudieran restringir la financiación y, por tanto, frenar el crecimiento.Desde Berlín, la cancillería no ha tardado en replicar que la propuesta de Sarkozy no es novedosa y que Angela Merkel ya lanzó una similar durante el último encuentro de jefes de estado y de gobierno del G-8 en la localidad alemana de Heiligendamm el pasado mes de junio. Desde la oficina de Merkel se insiste en que la canciller lleva meses pidiendo que se trabaje por la transparencia en los mercados financieros internacionales.