2006 fue un año inolvidable para la bolsa española, que registró la mayor subida de su historia. Pero no tanto para el gestor de los parqués nacionales, que tuvo un complicado debut en el mercado.A pocos días de su presentación de resultados del conjunto de 2006 -desvelará sus cuentas el 27 de febrero-, algunos analistas se aventuran a estimar sus posibles cifras de beneficio... y a especular, una vez más, con probables movimientos corporativos en torno al valor.Con este panorama, las acciones de BME despidieron la semana con un repunte del 3 por ciento, que hizo que marcaran un nuevo máximo histórico en 38 euros. Además, este repunte estuvo apoyando en un elevado volumen de negociación, ya que se intercambiaron más de un millón de títulos del gestor de la bolsa, cuando la media diaria trimestral se sitúa en torno a los 600.000.Los rumores sobre concentración llevan tiempo llamando a la puerta de BME. Pero esta vez parece que "los acontecimientos se están precipitando", según publicó ayer El Confidencial citando fuentes conocedoras de la operación. Al parecer, las conversaciones con la Deutsche Boerse se encuentran "muy adelantadas", ya que existe una especulación paralela sobre el interés del Nasdaq por la bolsa española, después de su infructuosa opa sobre la bolsa de Londres.Paralelamente, BME también está en el punto de mira ante su inminente presentación de resultados. Ya hay algunos expertos de mercado que han lanzado las primeras estimaciones. En el caso de los que ha consultado la agencia Reuters, esperan de media que el gestor del parqué español haya tenido en 2006 un beneficio neto de 127,3 millones de euros, es decir un 25 por ciento más de lo que ganó en 2005.